Meiszner destacó que la provincia puede reservarse facultades propias en la adhesión. «Desde el punto de vista legal, la provincia puede reservarse facultades que le son propias ya que una adhesión sin condicionamientos tampoco es buena», afirmó en diálogo con LU20. Agregó que se hará énfasis «desde el punto de vista de la administración de los recursos naturales» y la competencia provincial sobre su explotación.
El RIGI ofrece incentivos fiscales, aduaneros y cambiarios para atraer inversiones al país. El Gobierno nacional busca promover proyectos de larga duración, especialmente en minería, petróleo y gas.
Sin embargo, el Centro de Economía Política (CEPA) cuestionó la medida, argumentando que «se otorgarán excesivos beneficios tributarios y cambiarios durante 30 años a quienes inviertan un mínimo de 200 millones de dólares, sin ninguna exigencia. No hay sectores prioritarios, ni obligación de promover proveedores locales, ni agregar valor en Argentina».
La Federación Económica del Chubut (FECH) se mostró optimista ante la posible llegada de inversiones, considerando el proyecto «clave para el desarrollo de Chubut», con énfasis en la producción de hidrógeno verde, la pesca y el turismo.
Actualmente, Río Negro es la única provincia patagónica adherida al RIGI.