A los 19 años, Ignacio Martín registra frondosos engaños a la administración pública y también a privados.
Conocido en Córdoba como el “médico trucho” del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), la entidad encargada de diseñar e instrumentar estrategias contra el Covid-19, fue detenido hace unos días en la casa de sus padres. Usaba una matrícula correspondiente a una médica, tenía un carnet de inspector de Tránsito de la Municipalidad de Córdoba y tiene una causa judicial pendiente por estafas en compras online.
Este lunes se presentó la primera denuncia por supuesta mala praxis, tras la muerte de un paciente de 29 años. La recibió el fiscal de Río Cuarto, Pablo Jávega, y pasó al fiscal Daniel Miralles con las otras dos existentes por hacerse pasar por médico.
Según indica la denuncia, la familia del paciente que luego falleció llamó al COE porque había integrantes aislados por Covid-19. Martín ingresó al domicilio, fue a la habitación de la persona que después falleció y, según refiere la madre del paciente, le puso en un dedo un aparato que comenzó a hacer un ‘pip, pip’.
“Entonces notan nerviosismo en Martín y él le pregunta a la madre y al hermano si alguno sabía hacer RCP. El hermano, en pleno nerviosismo dice ‘yo’ y entonces Martín dice ‘bueno, arrancá’”, relató el abogado de la familia, Mateo Abrile, a Puntal de Río Cuarto.
“La madre se retira de la habitación, y al rato sale el hermano, que le refiere que llame al 107, porque el médico lo pedía. Llaman al servicio de emergencia y allí llegan un médico, con enfermera y equipamiento acorde, ingresan a la habitación y luego de unos 20 minutos sale el médico con Ignacio Martín y el médico de emergencia le reafirma que no había más nada por hacer”, agregó el abogado.
Primero se dijo que Martín tenía 24 años y que ingresó como voluntario del COE en Río Segundo, en uno de los brotes de coronavirus; después pasó a Río Cuarto, donde aprendió a hisopar, dio capacitaciones y presentó un carnet que, recién en diciembre, se descubrió que era falso porque correspondía a una médica mujer. El Ministerio de Salud hizo una denuncia penal y afirmó nunca haberle pagado por sus tareas en el COE.
Primera alerta
Andrés de León, presidente del Colegio de Médicos de Córdoba, confirmó a LA NACION que la primera alerta proviene de la Municipalidad de Río Cuarto cuando “aparentemente esta persona intentaba conseguir un contrato de locación de servicios para trabajar en un centro de salud”.
Ya en 2019 Martín se había hecho pasar por inspector de la Municipalidad de Córdoba. Usaba ese carnet para entrar a espectáculos públicos. Desde la gestión anterior afirmaron que “desapareció” cuando empezaron las sospechas pero no dieron más datos. Hay imágenes en las redes sociales que lo muestran con el chaleco municipal.
La semana pasada, cuando la Policía fue a detenerlo a la casa de su familia en el barrio Zumarán, de Córdoba, encontró un maletín de médico, un bolso del COE, chaquetillas y, en el patio, una maceta con una planta de marihuana. Los agentes secuestraron también la computadora personal de Martín y su teléfono celular.
La matrícula profesional usurpada por Martín es de Alyssa Goncalvez, una joven médica que trabaja en una clínica de barrio General Paz. Ella ya hizo los trámites en el Consejo de Médicos para no verse afectada por las actuaciones de quien usó sus datos.
Martín se inscribió ante la AFIP como monotributista categoría B el 17 de diciembre de 2014, cuando tenía 13 años, y puso como actividad: “Servicio Médico Integrado de consulta, diagnóstico y tratamiento” (863300). El 12 de mayo del año pasado registró a su nombre “AtencionmedicaSRL.com.ar”, razón social con la que facturó las guardias a la Municipalidad de Río Cuarto. Su novia, con 20 meses de cursado para paramédico, dice ignorar todos los detalles de la vida paralela del joven.
En sus cuentas de redes sociales ponía médico y paramédico y posteó una foto en la que daba una conferencia de prensa en Río Cuarto por el COE.
Fuente: lanacion.com