La víctima sufría bullyng por parte de los sospechosos, quienes habrían planeado el ataque. Encontraron el cuerpo este lunes en un descampado con cortes y quemaduras.
El hecho ocurrió en Merlo. Un adolescente de 13 fue asesinado por otros menores que le tenían “odio y bronca”, y habrían elaborado un plan para atacarlo solo por “placer”, según publica C5N.
Este lunes apareció el cuerpo en un descampado de Mariano Acosta, con cortes de arma blanca y quemaduras. Por el caso, hay dos detenidos.
Los resultados preliminares de la autopsia indicaron que la víctima, identificada como Nicolás Alexander Cernadas, falleció unas 24 horas antes del hallazgo, posiblemente el domingo por la tarde. Murió debido a las heridas de arma blanca y lo prendieron fuego cuando aún estaba con vida.
En las redes sociales del adolescente, los investigadores descubrieron conversaciones con otros dos menores, sospechosos del crimen. Consideran que elaboraron un plan para atacarlo, y que lo hicieron “un poco por placer y otro poco por el odio que le tenían a la víctima, a la que conocían del barrio”.
Uno de los agresores filmó el momento del ataque y luego pretendía regresar a la escena del crimen para registrar el estado en el que había quedado el cadáver. Según los investigadores, «tenía la fama de ser muy agresivo en el barrio y solía pelearse con otros jóvenes y luego filmar cómo los había dejado heridos».
Un adolescente de 14 años se presentó junto a su madre en la sede de la Comisaría 6ta de Merlo, en Mariano Acosta, y se puso a disposición de la Justicia. Por su edad el expediente pasó a la Justicia de Menores, que ahora deberá determinar si mantiene al adolescente bajo resguardo en algún instituto.
El detenido quedó a disposición de la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil 2 de Morón, a cargo de la fiscal Aldana Zingg. Este jueves fue detenido otro de los sospechosos, un joven de 17 años, quien también fue puesto a disposición de la Justicia de Menores de Morón.
Los chats que comprometen a los sospechosos
En los mensajes privados de Instagram entre los dos menores sospechosos del crimen, los investigadores encontraron conversaciones contundentes para el caso.
«Yo ando re con la cabeza a full por lo de ayer», sostuvo uno de los adolescentes. El otro le respondió con unos mensajes de audio, y el primer joven acotó: «Ya sé, amigo, pero queda el cargo de conciencia igual».
En otra parte de la conversación, uno de los sospechosos le informó al otro que se había descubierto el crimen. «Gato, mirá, ya, ya. Lo encontraron en la zona donde lo dejamos», escribió. «No, LPM. Ya está, cagamos», se lamentó el segundo joven.