Más de medio millón de argentinos disfrutan en el inicio de la temporada ‘protocolizada’

Se trata de una temporada de verano un tanto particular, muy distinta a cualquiera de las anteriores a raíz del establecimiento de protocolos para poder evitar contagios de covid-19, al tiempo que por la crisis…

lunes 07/12/2020 - 0:21
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Se trata de una temporada de verano un tanto particular, muy distinta a cualquiera de las anteriores a raíz del establecimiento de protocolos para poder evitar contagios de covid-19, al tiempo que por la crisis desatada por la pandemia los precios en hospedaje, gastronomía y vida en la playa dieron un salto considerable en comparación con la temporada 2019/2020.

Además de requisitos y restricciones a tener en cuenta si vas a vacacionar a la costa, una de los destinos predilectos en verano, en esta nota vas a encontrar cuánto costará la carpa en la playa, hospedarse, comer e ir a bailar, publica La Nación.

Más de 530.000 argentinos sacaron el Certificado Verano para poder circular por el país con fines turísticos este fin de semana largo y ya disfrutan en los distintos destinos que Argentina ofrece aun en tiempos de pandemia del coronavirus.

En una temporada de verano marcada a fuego por los protocolos con recomendaciones sanitarias en playas, balnearios, alojamientos y establecimientos gastronómicos en los destinos turísticos de Argentina, se destaca en el inicio de la misma en la provincia de Buenos Aires una gran concurrencia en ciudades balnearias como Mar del Plata, Villa Gesell, Pinamar, el Partido de la Costa y Monte Hermoso, a la vez que también hubo un intenso movimiento en San Martín de los Andes, Villa La Angostura, Gualeguaychú y Federación.

“El movimiento turístico del fin de semana largo es una gran noticia para el sector, tan golpeado por esta crisis inédita”, aseguró en las últimas horas el ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens.

Agregó que “desde el Estado Nacional brindamos las condiciones para que haya temporada, fundamental para reactivar las economías regionales. Vamos a disfrutar nuestros maravillosos destinos y a seguir cuidándonos”.

Con la decisión política de tener temporada de verano luego del año más difícil para el sector, el Ministerio de Turismo y Deportes y la Secretaría de Innovación Pública presentaron la plataforma virtual argentina.gob.ar/verano, donde se pueden conocer los requisitos para ingresar a las provincias y completar el certificado “Verano”, un registro (obligatorio en varias provincias) para que los destinos estén mejor preparados para recibir turistas.

Para tener en cuenta de cara a la presente temporada veraniega en la costa bonaerense, uno de los destinos más elegidos por los argentinos en esta época del año,  el gobierno de Axel Kicillof estableció 13 protocolos para poder evitar contagios de covid-19. En líneas generales,  constituyen medidas generales focalizadas en el distanciamiento social, el lavado frecuente de manos y el uso de tapabocas para la realización de cualquier tipo de actividad.

Y hasta el momento, el turista respondió. Así por lo menos lo demuestran las imágenes que llegan por ejemplo desde Mar del Plata, con playas concurridas pero muy aireadas para este inicio de temporada.

Según dio cuenta el diario La Nación, dicha ciudad balnearia es uno de los puntos más concurridos este feriado largo. Solo para ingresar a Mar del Plata se tramitaron esta semana más de 40.000  permisos Verano, a los que deben sumarse otros casi 25.000 de propietarios no residentes que llegaron desde el lunes último, números que no contemplan a los menores de edad

De todos modos y más allá de un cumplimiento generalizado de los protocolos en esta primer semana de temoorada, no faltaron excesos. Según apuntó el mencionado diario, «lo más impactante fue un after beach en el Balneario 12 de Punta Mogotes, pleno de jóvenes con tragos en mano, en torno a una piscina y lejos del formato de ‘burbuja social’ recomendado para bares y discotecas. Desde el consorcio que administra ese complejo le llegó al permisionario un tibio tirón de orejas y advertencia de sanciones, incluso la clausura, en caso de que se repitan esas situaciones que implican riesgo sanitario. Estos abusos y las fiestas clandestinas, siempre con los más jóvenes de por medio, asoman como el gran dolor de cabeza para los controles durante este verano que recién comienza»

Protocolos en hoteles y alojamientos

En el caso de los alojamientos, no se habilitarán espacios comunes, como sala de estar, salones de usos múltiples o de juegos.

Los desayunos y comidas incluidas en la tarifa deberán suministrarse en la habitación o en la modalidad “para llevar”: podrán ser consumidas en el desayunador o comedor del hotel, siempre y cuando se cumpla con el aforo del 30%, distanciamiento social y condiciones de higiene y desinfección.

La climatización de los espacios comunes se deberá realizar exclusivamente con ventilación natural para garantizar la renovación del aire con ventilación cruzada. El uso de aires acondicionados de tipo split o ventana estará permitido en las habitaciones donde se encuentran los grupos de convivientes, pero no los aires acondicionados centrales.

En la playa

En el caso de los balnearios, no estará permitida la realización de actividades deportivas grupales o recreativas en la que no pueda garantizarse la distancia preventiva de 2 metros entre personas.

La distancia mínima entre sombrillas deberá ser de dos metros y la capacidad máxima por sombrilla y por carpa será determinada por cada municipio.

Las piscinas podrán funcionar solo al aire libre y con un sistema de turnos que garantice un aforo del 30%.Tampoco estarán habilitados los gimnasios en los balnearios, ni el sector de juegos infantiles.

En las playas públicas, a las medidas generales de distanciamiento y uso de tapabocas se sumará la desinfección periódica de los sanitarios públicos, que deberá ser garantizada por los gobiernos municipales.

También deberá proveerse lugares adecuados para lavado de manos con agua y jabón (dispensador de jabón líquido/espuma, toallas descartables o secadores de manos) y alcohol al 70%, ubicados a una altura no mayor de 1,20 m para garantizar su alcance por todas las personas.

Los campings

En cuanto a los campings, su funcionamiento estará habilitado con un aforo del 50%, permitiendo el acampe parcela de por medio.

En el caso de las mesas, piletas de lavado y parrillas o fogones se podrán utilizar respetando la distancia social mínima de 2 metros entre personas que no pertenezcan al mismo grupo conviviente.

El uso de baños y vestuarios estará determinado por un sistema de turnos para evitar aglomeraciones y los espacios de juegos y canchas deportivas no estarán habilitados.

El Gobierno informó que estas medidas regirán desde el 1 de diciembre cuando se habilite la temporada veraniega que se extenderá hasta el 4 de abril de 2021.

No hace falta presentar un resultado negativo de COVID-19 para vacacionar

Si bien no es requisito obligatorio someterse a un test de coronavirus antes de partir a para la Costa, sí será obligatorio presentar el Certificado Verano, que se puede gestionar tanto desde el sitio www.argentina.gob.ar/verano o mediante la aplicación Cuidar, según informó el Gobierno bonaerense.

Costos

Según un informe elaborado por el Observatorio Inmobiliario de la Cámara Argentina de Servicios Inmobiliarios (Camesi), los valores de los alquileres en la Costa Atlántica bonaerense subieron entre 30% y 50% en su valor en pesos respecto del año pasado.

El relevamiento, que consultó a más de 3.100 operadores, mostró que para las casas y propiedades en lugares selectos de la Costa, como Pinamar o Cariló, los valores de alquileres se cotizan en dólares. En Mar del Plata, que es la ciudad con mayor cantidad de visitantes, una sombrilla en balneario costará toda la temporada $95.000 y por día $2.500; mientras que una carpa sube a $115.000 y $4.500, respectivamente.

En cuanto a los precios relacionados con la comida, el portal Infobae señala que un café en un bar ronda $80, mientras que un desayuno que incluye café con leche con dos medialunas cuesta en promedio $170. Un café con leche y porción de torta oscila en $250 y un plato de rabas en balnearios cuesta 700 pesos.

Si se apunta a almorzar, un menú turístico que incluye plato principal, bebida sin alcohol y postre tiene un valor de 670 pesos.

Protocolos en boliches

La noche en bares y boliches también deberán ser acompañadas con estrictos protocolos para poder llevarse adelante.

En los últimos días la Cámara de Discotecas de la provincia de Buenos Aires presentó finalmente el protocolo que determina que quienes decidan ir a bailar deberán dejar sus datos en la puerta de los boliches, se les tomará la temperatura y podrán estar en espacios al aire libre en deck de 2,5 metros por 2,5 metros en grupos de no más de seis personas.

Aquellos establecimientos que no cuenten con espacios al aire libre podrán tener un ingreso de hasta el 30% de la capacidad total y demostrar que cuenta con buena ventilación, tanto que deberán contar con un sistema que de entrada y salida de aire pueda limpiar el salón hasta 10 veces en 24 horas.

Para la entrada se van a vender mesas. El valor para cuatro personas oscila entre $1.500 a $3.000 dependiendo el boliche, consigna Infobae. Incluye una botella de champagne, energizantes, gaseosas o aguas. Y el valor de la entrada general va a estar en $800 con una consumición.

“Tenemos que abrir porque necesitamos sobrevivir”, contó al portal Gustavo Palmer, el mítico dueño de la discoteca Ku de Pinamar y hoy vocero de la Cámara provincial.

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