Más de 13 mil chicos perdieron en la Argentina al menos a uno de sus padres por coronavirus

Se sabe que los niños que pierden a un padre pueden experimentar una cascada de consecuencias negativas. “El COVID-19 ha creado esta crisis urgente que afecta a los niños en casi todos los países”, dijo…

martes 10/08/2021 - 9:07
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Se sabe que los niños que pierden a un padre pueden experimentar una cascada de consecuencias negativas.

“El COVID-19 ha creado esta crisis urgente que afecta a los niños en casi todos los países”, dijo Susan Hillis, del equipo de respuesta covid de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU., que trabajó en un estudio publicado en la revista científica británica The Lancet, en el que se analizaron datos de 21 naciones, que representan el 76,4% de las muertes por covid a nivel mundial.

Para la Argentina, el estudio estima que entre el 1 de marzo de 2020 y el 30 de abril de 2021, 2.658 niños y adolescentes perdieron a su mamá, debido a muertes asociadas al coronavirus y que 10.341 perdieron a su papá. En total, se trata de 14.117 menores que en la Argentina perdieron a sus cuidadores, si se cuenta también la muerte de un abuelo (533) o la de una abuela (577).

Utilizaron métodos desarrollados y validados hace años para estimar la cantidad de niños en todo el mundo que habrían quedado huérfanos a causa del sida para calcular la cantidad de huérfanos de COVID-19.

El impacto

Los huérfanos también tienen más probabilidades de abandonar la escuela y quedar atrapados en un ciclo de pobreza. Un estudio encontró que su riesgo de suicidio era el doble que el de sus compañeros que no habían experimentado la muerte de un padre; esta posibilidad seguía siendo elevada durante los 25 años siguientes al deceso del progenitor.

“Es un hecho triste que millones de niños hayan experimentado la adversidad en el contexto de la pandemia de COVID-19, y seguirán haciéndolo. Estamos viendo un aumento en el abuso infantil, la violencia familiar y la inseguridad alimentaria, por poner solo algunos ejemplos”, plantea la experta.

El apoyo

La buena noticia es que la mayoría de los niños es resiliente. Con la combinación correcta de servicios y recursos, los chicos huérfanos pueden estar sanos, felices y tener un buen desempeño en la escuela. Los investigadores pueden evaluar críticamente la evidencia de contextos de altos y bajos recursos, incluidos los más afectados por la epidemia del VIH, y adaptar estas lecciones al contexto sociopolítico relevante.

La investigación sobre el apoyo al duelo infantil es escasa, pero hay breves intervenciones basadas en la evidencia que podrían adaptarse y ampliarse. ¿Qué se puede hacer al respecto? En primer lugar, los investigadores recomiendan llevar las vacunas COVID-19 a todo el mundo lo más rápido posible y ayudar a prevenir infecciones de otras formas, incluido el uso de barbijos y el distanciamiento.

“En nuestro estudio, encontramos que tres cuartas partes de las personas huérfanas por COVID-19 en los Estados Unidos eran adolescentes, por lo que trabajar a través de consejeros escolares podría ser una forma factible de llegar a una gran población con atención informada sobre el trauma”, finaliza la autora del trabajo.

Fuente: TN

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