El secretario de Energía consideró que los actuales valores del crudo no justifican su reinstauración. El precio sostén quedó sin efecto el pasado 30 de agosto.
El secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez, salió a poner paños fríos a las primeras voces que ya se oyen en la industria hidrocarburífera nacional y advirtió que de momento no se volverá a poner en vigencia un precio sostén o barril criollo para el crudo comercializado en el país.
La respuesta de Martínez se debe al cambio de escenario que comenzó a darse en la industria en los últimos días. Las segundas olas de coronavirus en las principales potencias mundiales, en especial en Europa, marcaron que la cotización internacional del petróleo volviera nuevamente a descender ante lo que se espera sea un nuevo período de bajo consumo.
En esa baja de precios desde algunos sectores de la industria hidrocarburífera se espera que se actualice el DNU 488/2020 del barril criollo que dejó de funcionar en lo que hace al precio sostén el pasado 30 de agosto cuando se cumplió con la norma que fijaba que si por diez días consecutivos el precio del crudo internacional igualaba o superaba los 45 dólares que se habían fijado para el barril criollo, el mismo quedaría sin efecto.
Durante el Energy, Oil&Gas Summit de Forbes, Martínez fundamentó su postura al sostener que “estamos en valores donde la tensión no es muy grande”. Es decir que la diferencia entre el valor del Brent de referencia para el mercado argentino que determina el precio que el crudo nacional puede conseguir en el exterior y el valor con el cual están operando las refinerías locales.
Martínez explicó que “cuando se de una tensión más grande entre las productoras, las refinadoras y los gobiernos provinciales, iremos analizando algunas decisiones pero hoy estamos en valores muy cercanos”.
Pero advirtió que “tienen que entender las productoras que el barril criollo también trajo el beneficio de las retenciones a la baja que abrieron la ventana de oportunidades en el petróleo para las exportaciones muy importante y que sigue firme más allá de los 45 dólares”.
El 19 de mayo pasado, cuando entró en vigencia el DNU que obligó a las empresas locales el a comercializar el crudo a 45 dólares el barril, el Brent cotizaba a 35 dólares, es decir 10 dólares por debajo del precio regulado para el mercado local.
Luego de mantenerse por casi dos meses por sobre el rango de los 40 dólares, desde mediados de esta semana la cotización internacional comenzó a caer y ha llegado a descender hasta los 37,40 dólares por barril, muy cerca del valor que tenía cuando se reinstauró el barril criollo.
Sin embargo, desde entonces los márgenes de las refinerías han mejorado a partir de los últimos incrementos en el precio de las naftas, por lo que las mayores presiones responden ahora a las provincias que ven menguadas sus regalías y a las empresas que son netamente productoras.