Después de un mes a pura desmentida, María Eugenia Vidal y el periodista deportivo Quique Sacco blanquearon su relación con una romántica salida por San Telmo.
La revista Caras los retrató a la salida de la parrilla La Brigada, un lugar al que la ex gobernadora frecuentó en más de una oportunidad con comensales de la rosca política como Horacio Rodríguez Larreta.
La confirmación del blanqueo se da menos de una semana después de que Vidal le entregara los atributos de bando a Axel Kicillof. En efecto, durante la transición con el actual gobernador fue el lugar elegido por ella para despedir la gestión junto a su equipo más cercano.
De acuerdo a lo que pudo saber BigBang, Vidal y Sacco se conocieron nada más y nada menos que en la mesa de Mirtha Legrand el pasado cuatro de agosto, una semana antes de las PASO. Sin embargo, los rumores de relación se instalaron recién la segunda semana de noviembre. En su momento, el viudo de Débora Pérez Volpin se encargó de desmentir de lleno la información: «Me taladraron el teléfono. Fui contundente. Estoy solo. Aún no es mi tiempo. Hoy tengo otras prioridades».
Sin embargo, desde el entorno de la por entonces gobernadora saliente se mostraban cautos. Sí, negaban la relación; pero con cierto grado de humor. Tal vez el blanqueo responde a la nueva etapa en la vida de Vidal, quien alejada del poder bonaerense, abandonó la Base Aérea de Morón y se instalará junto a sus tres hijos en un departamento en Barrio Parque que compró con parte del dinero que le quedó de la venta de la casa que compartía en Morón con Ramiro Tagliaferro antes de su divorcio.
Lo llamativo del caso es que Vidal eligió la parrila La Brigada para blanquear su relación. El lugar es frecuentado por muchos políticos, de ambos lados de la grieta. Aquellos rinconcitos abocados a la rosca política que, en esta oportunidad, ofició de contención para su blanqueo sentimental.
Durante la campaña, Vidal habló de su vida personal en el mano a mano que mantuvo con Alejandro Fantino. Por ese entonces, no había conocido a Sacco. «Siempre hay una etapa en la que conocés a alguien que todavía no sabés si va a ser una pareja. «Todavía no apareció un hombre que me partiera la cabeza, pero va a aparecer. Creo que es cuestión de tiempo», anticipó en abril la gobernadora.