«Es emocionante contribuir a la mejora en la calidad de vida de las familias» expresó el intendente municipal.
Una madre con 4 hijos, y un hombre con movilidad reducida, ambos vecinos del barrio Máximo Abásolo, fueron los beneficiarios de las dos viviendas construidas por el área de Hábitat de la Municipalidad aledaña a los ambientes donde vivían antes en condiciones precarias.
“Es emocionante contribuir a la mejora en la calidad de vida de las familias. Poder ver a Noelia y sus hijos que cuando los conocí les prometí que íbamos a ampliar su casa. Tenían la necesidad de poder vivir en un lugar digno, donde los chicos puedan crecer en su espacio, que puedan tener una habitación y un baño como corresponde”, expresó el intendente Juan Pablo Luque tras entregar la llave en mano de los beneficiarios junto al subsecretario de Hábitat, Miguel Araneda.
El mandatario además agradeció a toda la gente de dicha área municipal “que hicieron esta obra en poco tiempo y que permite que estas familias puedan vivir dignamente”.
Por su parte, Noelia, una de las beneficiarias, se manifestó “agradecida
con el municipio y al intendente Luque que cumplió con lo prometido. No lo podía creer hasta que la vi terminada. Tengo 4 hijos entre 3 y 15 años. Es un nuevo comienzo esto”.
Por último, Diego también recibió la llave de su nueva casa, una vivienda adaptada a sus necesidades para poder trasladarse con la silla de ruedas: “Me encantó cómo quedó. Está adaptada a mis necesidades y ahora vamos por una ampliación”, dijo.