El matemático argentino Luis Caffarelli, bonaerense de 74 años, fue el primer latinoamericano en recibir el Premio Abel, considerado «el Nobel de matemática» y dotado con 7,5 millones de coronas noruegas (660.000 euros). El reconocimiento fue gracias a su aporte vinculado a las interacciones entre sólidos y líquidos, que abre nuevas puertas a la medicina, la automoción y el conocimiento del universo
Caffarelli, en una entrevista concedida a El País de España, contó por qué es tan complejo y necesario su objeto de estudio, partiendo del nuevo mundo que se crea en la interacción de un hielo en el agua, un microcosmos en el que trabaja desde hace más de cuatro décadas.
Su aprendizaje comenzó en la Universidad de Buenos Aires (UBA), donde se doctoró, y luego emigró con una beca a Estados Unidos, donde reside. Allí pasó por el Instituto de Estudios Avanzados de Princeton, en el que recaló el físico alemán Albert Einstein huyendo de los nazis. En 2012 la UBA le otorgó el doctorado honoris causa.
“Las matemáticas vinculadas a la física son las más interesantes. Yo no soy muy partidario de hacer investigaciones superabstractas, que solo puedan entender media docena de matemáticos”, sostuvo Caffarelli que también es miembro del comité científico asesor del Instituto de Ciencias Matemáticas (ICMAT), en Madrid. “No puedes alcanzar la verdad, pero por lo menos puedes acercarte a ella, a la complejidad de la realidad”, afirmó el matemático.
El presidente, Alberto Fernández, saludó al galardonado a través de Twitter: “Felicito enormemente al matemático Luis A. Caffarelli por este Abel Prize, otro ejemplo del infinito talento argentino. Nuestra educación pública nos enorgullece”.
El ministro de Ciencia y Tecnología, Daniel Filmus, también celebró que Caffarelli es “talento argentino reconocido a nivel mundial” y su par de Educación, Jaime Perczyk, destacó que es “graduado y doctorado de la universidad pública argentina” y “un orgullo para nuestro país”.
“Es un reconocimiento totalmente equivalente al Premio Nobel de otras disciplinas. No entra en un tuit todo lo que tenemos para decir. La matemática argentina está de fiesta! Felicitaciones Luis!”, compartió en sus redes Pablo Groisman, profesor asociado del Departamento de Matemática y secretario de Posgrado Adjunto en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA.
Por su parte, el exrector del Colegio Nacional Buenos Aires -donde estudió Caffarelli- y profesor de Matemática y Astronomía y de Matemática y Computación, Gustavo Zorzoli, tuiteó esta mañana: “Felicitaciones a Luis Caffarelli, egresado del Colegio Nacional de Buenos Aires, quien obtuvo el premio Abel, considerado el Nobel de las Matemáticas”.
Video: así se enteraba Luis Caffarelli de que era el ganador
Caffarelli recibió la noticia a través de una videollamada, en la que estuvo acompañado por su esposa Irene Gamba. El matemático dijo sentirse “sorprendido” y “contento” y declaró que era “un honor recibir esta distinción, que pone de relieve toda una vida de trabajo”.
A través del video se puede ver la profunda emoción que le causó a su compañera, que conoce de primera mano el trabajo del matemático que dedicó su vida a sus estudios.
La Academia Noruega de Ciencias y Letras, que concede el premio Abel, destacó los resultados “técnicamente virtuosos”, sobre todo en los llamados problemas de frontera libre, como esos modelos matemáticos de lo que ocurre en la superficie de contacto entre el agua y el hielo, o en una aleación de diferentes metales fundidos que se solidifican a distinto ritmo.
“Los teoremas de Caffarelli han cambiado radicalmente nuestra comprensión de las clases de ecuaciones diferenciales parciales no lineales con amplias aplicaciones. Sus resultados son técnicamente virtuosos y cubren muchas áreas diferentes de las matemáticas y sus aplicaciones”, sostuvo el presidente del Comité del Premio Abel, Helge Holden.
Los avances de Caffarelli también permitieron profundizar las ecuaciones de Navier-Stokes, que describen desde 1845 el flujo de un fluido viscoso, como el aceite. Estos estudios son fundamentales para el análisis de la circulación sanguínea de una persona, la predicción del movimiento del petróleo, las matemáticas financieras o el perfeccionamiento de los modelos fundamentales que explican el universo.
Caffarelli es el primer latinoamericano que gana el Premio Abel, un galardón establecido en 2002 por el Gobierno noruego para cubrir el vacío matemático de los Nobel.