Al cabo de los primeros encuentros con las operadoras, el secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas Privado del Chubut, Jorge Ávila, señaló que la situación por los equipos “es compleja y lo sabían desde el día que se firmó el decreto de congelamiento del barril”.
“Fuimos los primeros en salir a decir que eso era nefasto para la industria petrolera. No había ninguna duda de que iba a provocar esto y se ratifica la incompetencia que tienen las empresas para manejar la situación, hablo de las operadoras; pero el costo más grande lo pagan las PyMEs de la región que no pueden facturar ni pueden competir, y quedan con un enorme costo, realmente imposible de superar”, señaló luego de las reuniones de esta mañana en Buenos Aires de las que participó en compañía del secretario adjunto, Carlos Gómez y miembros de Comisión Directiva.
Ávila indicó que todavía no hay nada concreto en ese sentido que por el momento lo único seguro es que se pagarán los días caídos por los conflictos de provincia con los empleados estatales, reconocidos por las operadora, que no se pagaron a las PyMEs. “El resto está todavía todo en discusión. La continuidad todavía no la tenemos garantizada porque algunos equipos están parados, y la gente está subiendo a trabajar en esa situación, así que estamos a la espera de que se resuelvan estas reuniones.
De la mesa de hoy, indicó que “ellos hicieron una propuesta, nosotros una contrapropuesta. No estaban autorizados todos para tomar decisiones sin consultar, entonces quedamos en juntarnos más tarde para ver como es el horizonte de acá en más”.
Equipos afectados
El titular del Gremio más poderoso de la región enfatizó que “no hay ninguna posibilidad de que se revierta la decisión de Tecpetrol, lo conversamos hoy. Estamos en una fuerte discusión con ellos, encontrándole a una salida con el personal y la gente, pero no hay ninguna decisión de ellos de perforar”, ante lo que analizó que lo que sucede, es simple: el decreto no sólo golpea a estas empresas, porque nosotros podíamos sentarnos a hablar con las operadoras; sino que golpea el alma de la industria petrolera, que es Vaca Muerta, y como golpea allá, nosotros que somos la mezcla, nos resentimos muy duro, porque casi todo el colque a nivel nacional se dejaría de vender”, determinó.
“Hoy tenemos serios riesgos en los puestos de trabajo, al quedar parado el equipo de Tecpetrol sin posibilidad de salir, el de YPF parado, y uno en PAE que tampoco sale. El único que garantizó la salida dentro de diez días de otro Perforador, es CAPSA, que va a sacar el que había parado tal como lo hicieron todas las otras operadoras; pero el problema hay que entender muy bien que no es la parada del perforador, sino que estas empresas trabajan en todas las áreas y cuando empiezan a pararles equipos tanto en Neuquén como en Chubut, son equipos y sobrantes de gente que tienen en otros lugares que hacen que se sacuda Chubut, donde la situación no es tan grave, son cuatro perforadores y estaremos hablando de 60; 80 o 100 personas más los adicionales que se realizan, unas 250 personas que correrían riesgo de trabajo. Es más grave todavía porque el problema es en otros lugares donde estas operadoras tienen inversiones”, explicó ‘Loma’.
Sobre si estos equipos se bajan definitivamente o no, dijo que ingresan a tareas de mantenimiento “pero lo que pasa es que constantemente los tenían parados y al estar así, la empresa no factura y a veces ni siquiera se los repara porque no hay plata para hacerlo. Con esta situación, es muy probable que al estar parados esos Perforadores, dentro de un mes eso se resienta y pare algún workover igual, que van atrás de los perforadores”.
El decreto, YPF y las PyMEs
“El daño que el decreto le produce estructuralmente a la industria, es terrible porque congela un barril dónde YPF quiere pesificar la economía de la región. ¿Cómo hace una PyME para comprar una camioneta 0 Kilómetro que pide la Industria, a precio dólar y ponerla a precio pesificado en YPF?”, se preguntó el líder sindicalista.
Y agregó que el problema de YPF es, principalmente, inversión: “cotiza en bolsa, necesita tener una inversión constante, y la única forma de conseguirlo es trayendo plata e inversión de afuera. Pero con un riesgo país pisando los 2.000 puntos es imposible que alguien quiera invertir en la Argentina”, lamentó.
“Por lo pronto, vamos a buscar que se garantice que no haya despidos, el pago de salarios y las 8 horas de todo el personal. No podemos entrar en el sistema de suspensiones, con 15 días de trabajo y 15 suspendidos. No se puede hacer eso. Del resto, después veremos la situación, pero también que se queden tranquilos nuestros compañeros porque vamos a hacer todas las luchas que sean necesarias en favor de los puestos de trabajo. No vamos a permitir que pase lo de 2016, que en teoría fue por una crisis de barril. Esta no se entiende, porque es una crisis generada por un Presidente que no conoce la situación de todos los argentinos, ni la situación del país”, concluyó.
