No es una novedad que Argentina es uno de los países con mayor presión impositiva de la región, pero la alta carga tributaria se hace mucho más notoria cuando se comparan precios con los países vecinos. En ese marco, sobresale la situación particular de los vehículos 0 km, que en algunos países son considerablemente más baratos que en el territorio nacional, pese a que existen terminales en Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, indicó Infobae.
Por citar un ejemplo, un Fiat Cronos, que en Argentina cuesta el equivalente a USD 20.153 (a valor del dólar oficial), en Chile se consigue a USD 18.030 y en Brasil a USD 16.663, tomando en cuenta el tipo de cambio de cada país según sus respectivos Bancos Centrales.
Las diferencias son más notorias con el nuevo Chevrolet Onix, que del otro lado de la Cordillera de Los Andes se vende a USD 15.665 y en Brasil se obtiene por USD 15.063, en la Argentina está un 50% más caro (23.537 dólares).
También son grandes las brechas en las pick-ups, sobre todo las de alta gama. Sirve de ejemplo una RAM 2500, que localmente arranca desde el equivalente de USD 111.400, en Chile se vende a USD 88.827 y en Brasil a USD 91.240, siempre tomando como referencia la conversión de la moneda de cada país al dólar, según las cotizaciones oficiales.
La carga tributaria
Las diferencias de precios se explican por varios factores, pero principalmente por el contexto impositivo de cada país. Dante Sica, socio fundador de la consultora Abeceb y ex Ministro de Producción y Trabajo de la Nación, contó a Infobae que se pueden encontrar grandes brechas de precios con todos los países que integran la Alianza del Pacífico (Chile, Colombia, México y Perú), debido a que se trata de mercados con aranceles de importación muy bajos.
Los autos importados llegan al puerto de Valparaíso, Chile con arancel de apenas 6 por ciento (Reuters)
“En Chile, por ejemplo, todos los autos son importados y tienen un arancel muy bajo. Además, la estructura impositiva es menor a la nuestra”, remarcó el conomista.
Este último punto se refleja en el informe de “Estadísticas tributarias en América Latina y el Caribe 2022″, elaborado por el Centro de Política y Administración Tributaria de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico).Según el estudio, Argentina tiene una recaudación tributaria del 29,4% sobre el Producto Bruto Interno (PBI), en tanto que Chile es de 19,3% del PBI, Colombia 18,7%, México 17,9% y Perú 15,2% del producto.
Además, la carga impositiva puntual sobre el sector automotor es también bastante más elevada en Argentina. “Según nuestro análisis, del precio final de un auto en el país, el 45% son impuestos. Incluso los vehículos de fabricación nacional deben pagar tasas de 14%, 16% y 18% (dependiendo del insumo) para ingresar autopartes que también se fabrican en el país (el resto paga 2%)”, detalló Sica.
Los vehículos de fabricación nacional deben pagar tasas de 14%, 16% y 18% -dependiendo del insumo) para ingresar autopartes que también se fabrican en el país (el resto paga 2%- (Sica)
“El valor de un auto ‘extra zona’ (traído de afuera del Mercosur) equivale al precio CIF -costo de flete y seguros- más el 70%. Esto se debe a que se paga el arancel de importación (generalmente es el 20%), más el IVA, Ingresos Brutos y en la mayoría de los casos impuesto especial a los autos de lujo”, agregó el economista.
En Chile, en cambio, se tributa un “derecho ad valorem” del 6% del valor CIF del vehículo, más un 19% de IVA, que también se calcula sobre el valor CIF.
Las autopartes que no se fabrican en el país, pagan aranceles de ingreso de entre el 14% y el 18 por ciento (EFE)
Asimismo, hay otros países que están intentando facilitar el comercio internacional de vehículos 0 km. Esa es la situación de Brasil, que a mediados de 2021 redujo del 35% al 17,5% el arancel que pagan los autos europeos para ingresar en su territorio.
Otros factores determinantes
Más allá de lo impositivo, otro factor que incide en el valor final de los autos que se venden en el país es el dólar que se utiliza para cada operación. “Los autos que llegan del Mercosur entran por dólar oficial, pero los extrazona, que en general de los segmentos más altos, se cotizan al valor de contado con liqui. Por eso ya no hay ganancia de brecha”, sostuvo Dante Sica.
En tanto, Martín Clement, de Clement Comercio Exterior, comentó a Infobae que en la actualidad el valor de todos los bienes transables importados está aumentando debido a la incertidumbre que generan las trabas comerciales, a raíz del SIRA (Sistema de Importaciones de la República Argentina) y las restricciones de pagos al exterior.
“El SIRA es totalmente errático. No se conoce su comportamiento y, por tanto, no se pueden prever los tiempos ni criterios de autorización”, sostuvo Clement.