Vecinos del barrio Maldonado, en la provincia de Córdoba, se toparon con una escena que rozaba lo increíble: un joven de 21 años se encontraba atado con cinta a un poste de luz, con un cartel colgado en el pecho que rezaba la contundente frase «la familia no se roba».
El hallazgo, que sorprendió a los residentes del barrio, derivó en un llamado a la Policía. Efectivos policiales acudieron al lugar y procedieron a liberar al joven, identificado posteriormente. El muchacho fue trasladado de inmediato al hospital Misericordia, donde recibió atención médica debido a las lesiones que presentaba en el pecho, producto de la inusual inmovilización.
Mientras el joven era asistido, los agentes policiales iniciaron una rápida investigación para esclarecer los motivos detrás de este particular escarmiento público y dar con los responsables. Las primeras averiguaciones condujeron a una joven, cuñada del damnificado, quien aportó un dato clave: según su testimonio, esa misma mañana el joven atado al poste había ingresado a su domicilio y le había sustraído un reflector, detalló Noticias Argentinas.
Tras este presunto delito, la noticia corrió rápidamente entre los vecinos del barrio Maldonado. Según relatos de testigos, una autodenominada «banda que controla el barrio» habría tomado la decisión de impartir justicia por mano propia.
El joven fue «detenido» por este grupo, quienes lo trasladaron hasta la vía pública, lo ataron a un poste, le confeccionaron un cartel improvisado con una lapicera y se lo colgaron al cuello, antes de retirarse del lugar, dejando al joven a la vista de todos los transeúntes. «Escribieron el cartel con una lapicera, se lo colgaron del cuello y se fueron caminando», detallaron vecinos consternados por la situación.
Una vez dado de alta del hospital, el joven quedó a disposición de la Justicia.
