Aseguran que para la mayoría de los clientes, el tope de adelanto en efectivo con tarjetas de crédito es muy inferior a los u$s1.500 mensuales establecidos por el BCRA. Hasta el momento no hay ninguna resolución y la decisión sería de los propios bancos.
El cepo cambiario se estaría ampliando cada vez más en las extracciones de efectivo que se pueden realizar en el exterior como adelantos de las tarjetas de crédito, ya que para la mayoría de los clientes el límite es muy inferior a los 1.500 dólares que el Banco Central le pidió a los bancos locales.
Aparentemente las emisoras de los plásticos y los bancos están tomando más recaudos para mantener los consumos en dólares de sus clientes, evitando abusos y disminuyendo la fuga de capitales.
El esquema comenzó a regir a partir de septiembre, pero muchos clientes alzaron la voz porque el monto definido, equivalente a 1.500 dólares por tarjeta para extraer en el exterior, resulta menor en la gran parte de los casos.
Según destaca hoy el diario Ámbito Financiero, «algunas entidades, por ejemplo, lo fijaron directamente entre 4.700 y 4.800 pesos, o sea unos 1.000 dólares. Otras directamente optaron por poner dos limitaciones: o el equivalente de 1.000 dólares o el 10% del límite de compra autorizado, el menor de esos dos valores».
Según pudo confirmar Infobae.com con dos entidades bancarias (Citibank y HSBC), si una tarjeta tiene un límite de compra de 20 mil pesos, el adelanto en efectivo será de2.000 pesos, un nivel muy por debajo del tope establecido.
Las limitaciones para extracciones comenzaron en marzo en el caso de las tarjetas de débito (Resolución «A» 5294 del BCRA). Pero ahora, con estas mayores restricciones –aún no hay una comunicación ni resolución oficial- acceder a dólares al tipo de cambio oficial se va tornando cada vez más imposible.
Además, desde principio de mes, por una resolución de la AFIP, se está cobrando un15% adicional para las compras con tarjeta de crédito que se realicen en el exterior, y ese porcentaje podrá aplicarse a cuenta del impuesto a las Ganancias o Bienes Personales, aunque el organismo que comanda Ricardo Echegaray no reglamentó aún cómo se devolverá.