Un hombre terminó detenido tras intentar ingresar a una comisaría en Berisso para visitar a un amigo y entregarle dos sándwiches de salame y queso. Hasta ahí no había problemas, hasta que descubrieron que dentro de ellos llevaba droga escondida.
Todo sucedió cuando el hombre, de 59 años, se dirigió a la comisaría tercera, con la intención de visitar a un amigo detenido y compartirle algo de comida. Los efectivos de la Policía bonaerense revisaron el paquete con el que había llegado y descubrieron que entre el fiambre se encontraba oculta una bolsita repleta de cocaína.
Los efectivos encontraron el envoltorio con un contenido blanco en el interior de uno de los sándwiches y al analizarlo comprobaron que se trataba de 3,1 gramos de cocaína. El hombre, que trabaja de remisero, terminó siendo detenido al igual que su amigo.