El decreto presidencial incluirá restricciones a la circulación nocturna y suspensión de viajes de egresados, entre otras medidas pensadas para combatir la segunda ola de COVID-19.
El anuncio lo hará directamente el presidente Alberto Fernández esta tarde desde la residencia de Olivos, donde permanece aislado tras contagiarse de coronavirus. El decreto que impondrá nuevas restricciones a la circulación de personas y que limitará la actividad nocturna y las reuniones sociales, entre otras medidas, debido al aumento de los contagios en gran parte del país, entrará en vigencia a las 0 horas de este jueves y dejará sin efecto el que regía hasta el viernes 9 de abril, que había sido utilizado para extender el Distanciamiento Social Preventivo y Obligatorio.
Este DNU (decreto de necesidad y urgencia) se siguió puliendo esta mañana desde temprano con la comunicación permanente entre el Presidente, su jefe de Gabinete de Ministros, Santiago Cafiero, y la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra. Cafiero estuvo desde temprano en comunicación con varios gobernadores para conocer su posición sobre las resoluciones que se adoptarán. Ibarra hizo lo mismo desde su casa y alrededor de las 11 se instaló en su despacho en la Casa Rosada para ultimar los detalles de su redacción. El DNU saldrá publicado en el Boletín Oficial y contemplará que en algunas jurisdicciones no será necesario aplicar medidas extremas.
De acuerdo a lo que analiza el Gobierno los puntos principales del decreto pasarán por ampliar el despliegue de las fuerzas de seguridad federales y de las provincias para hacer cumplir la restricción de circulación, la suspensión de los viajes de egresados, la reducción en el aforo a los restaurantes y la vuelta de los controles en el transporte público, que estará disponible solo para personal esencial, incluidos alumnos y docentes porque las clases presenciales se mantendrán. También podría haber cierre de casinos y bingos y de algunos espacios de esparcimiento como los gimnasios.
El principal foco de negociación de Cafiero fue con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires que planteó objeciones desde un primer momento, sobre todo respecto del horario de cierre de bares y restaurantes y también de cines. Nación pretende un cierre de 22 a 6 y desde el distrito que gobierna la oposición a través de Horacio Rodríguez Larreta sostienen que debería ser más acotado, entre las 0 y las 6, para no perjudicar al sector gastronómico, uno de los más golpeados por la crisis económica que la pandemia acentuó.
Se habilitaron terrazas para que sea posible disfrutar de los mejores platos de la gastronomía marplatense (Crédito: Prensa Mar del Plata)
El tuit que publicó el ministro de Cultura de la Ciudad, Enrique Avogrado dejó en evidencia la dura postura de Ciudad sobre la limitación de las actividades nocturnas. “Cerrar a las 22hs es cerrar la cultura. Lo que se está discutiendo en estas horas es que el Gobierno Nacional plantea restringir toda actividad a partir de las 22 horas”, escribió el funcionario al comienzo de un extenso hilo. “Desde el Gobierno de la Ciudad estamos ofreciendo alternativas que permitan reforzar los cuidados y garantizar la salud de todos sin que eso vuelva a perjudicar a cientos de miles de personas que necesitan trabajar todos los días”, continuó en la red social Twitter.
La tensión entre Nación y Ciudad continúa latente. A pesar de que CABA junto a la provincia de Buenos Aires, Córdoba y Mendoza fueron las provincias en las que los casos de Covid-19 se duplicaron en los últimos 15 días, Rodríguez Larreta se mantuvo inflexible. Aunque el titular de Salud, Fernán Quirós, a primera hora de esta mañana había intentado relativizar los puntos de desacuerdo con el Gobierno nacional.
Cafiero sostuvo conversaciones telefónicas con los gobernadores de varios distritos desde ayer por la tarde y la noche. Y algunos de los mandatarios provinciales le informaron que ya se habían adoptado medidas para frenar la suba de casos o que estaban por implementarlas. Por ejemplo, en Mendoza, gobernada por el radical Rodolfo Suárez y aliado de Juntos por el Cambio a nivel nacional, la provincia ya determinó restringir la circulación de 0.30 a 5.30, y la realización de eventos en lugares habilitados cerrados a la mitad de su capacidad y con límite de 250 personas, mientras que al aire libre se deberá respetar la distancia de un metro cuadrado por persona y un tope de 250 asistentes. Las actividades deportivas en lugares cerrados también quedaron prohibidas.
En la provincia de Buenos Aires, donde son partidarios de medidas más estrictas para que los casos de coronavirus no sigan subiendo y para que no se sature el sistema de salud (ayer se registraron 10.402 casos positivos y hubo 82 fallecimientos), el gobernador Axel Kicillof se reunió en forma virtual con la mayoría de los intendentes de la provincia para consultarles sobre la situación epidemiológica y para comunicarles en que sentido irán las restricciones que se aplicarán en todo el territorio nacional a partir de este jueves. Algunas intendencias como Olavarría ya implementaron normas para limitar la circulación y cerraron los lugares de culto y las ferias de artesanos y emprendedores.
Desde el 3 de abril, son 87 los departamentos (lo que incluía a CABA y 13 jurisdicciones, con un total de 25,7 millones de personas) con alto riesgo epidemiológico.