Las entidades financieras elevaron su ganancia a niveles record gracias a la devaluación. El Banco Central informó que los bancos obtuvieron en mayo 14.500 millones de pesos, un 76 por ciento más de ganancias que un año atrás, por la disparada del dólar y las tasas. En cambio, los créditos en UVA se derrumbaron 42 por ciento.
Las crisis traen aparejadas oportunidades, pero siempre son aprovechadas por bancos y financieras. En el peor momento de la corrida cambiaria de este año, la cual derivó en una escalada del tipo de cambio y de los precios internos, estrangulamiento del crédito y congelamiento del consumo, el sistema financiero acumuló una ganancia para mayo de 14.555 millones de pesos, un 76,1 por ciento superior a igual mes del año pasado. Se trata del mayor incremento mensual. En los últimos doce meses de ejercicio acumula una ganancia neta de 93.301 millones de pesos, según el último informe sobre sistema financiero del Banco Central. Nuevamente la banca sacó la mayor tajada de la devaluación de mayo y abultó sus márgenes de ganancia. Por diferencia de cotización de sus tenencias en moneda extranjera, el sistema ganó 6184 millones de pesos (casi la mitad del total de rentabilidad de mayo), con un aumento del 115,5 por ciento respecto de igual mes del año pasado. En contraste, los créditos privados en UVA se derrumbaron 42 por ciento en junio, totalizando 7600 millones de pesos en préstamos frente a los 13.082 millones de mayo.
Si bien la aceleración de la devaluación del peso, motorizada por compras del sector privado ante la desconfianza de inversores y ahorristas sobre la conducción y el margen de maniobra del Gobierno, comenzó en diciembre pasado y está lejos de terminar, mayo fue sin dudas el mes emblema de la corrida. Fue cuando más se devaluó, más reservas se dilapidaron y el del anuncio de la vuelta al Fondo Monetario. En mayo el dólar finalizó con un incremento de 22,1 por ciento, suba equivalente a la de todo 2017, y la más grande tras la eliminación de las restricciones a la compra de dólares en diciembre de 2015 (33,5). Esta situación derivó en una crisis financiera que ahora el equipo económico de Cambiemos busca encarrilar con más ajuste presupuestario.
En medio de la crisis, los bancos vuelven a emerger como los principales favorecidos de esta situación. En mayo el sistema bancario ganó 6289 millones de pesos, un 40,4 por ciento más que en abril, cuando había obtenido una rentabilidad total del 10.366 millones de pesos, según el informe del organismo que conduce Luis Caputo. La banca privada se quedó con casi la mitad de esa ganancia, 7093 millones de pesos en mayo, un 53,3 por ciento más un año atrás. “Este incremento se explicó principalmente por el efecto del aumento del tipo de cambio nominal sobre el balance del conjunto de las entidades, reflejándose en mayores diferencias de cotización en los bancos privados y en un aumento de las ganancias registradas en otros resultados integrales en los bancos públicos”, admite en su informe el Central.
En la línea de balance que refleja la ganancia por impacto del movimiento del tipo de cambio, el sector financiero acumula en los últimos doce meses 31.438 millones de pesos, de los cuales 17.948 millones correspondieron a la banca privada. En mayo todo el sistema ganó por la devaluación 6184 millones de pesos, un 198 por ciento más que en abril previo (2071 millones). En el caso de la banca privada, la ganancia fue de 17.948 millones de pesos, un 323,7 por ciento más que en abril (4236 millones) y 339,4 por ciento interanual. Y la banca privada nacional sumó por este concepto 8137 millones de pesos, 341,2 por ciento por encima del mes previo y 397,2 por ciento superior a mayo de 2017. También abultaron sus márgenes por tenencias de activos ajustados por índice de precios, favorecidos por una mayor inflación empujada por la devaluación de la moneda.
Por ajuste de CER (coeficiente basado en precios) los bancos se embolsaron unos 4077 millones de pesos, un 437,6 por ciento por encima de igual mes del año pasado (758 millones). En lo que va del año acumulan beneficios por 20.353 millones de pesos producto de la apreciación de activos indexados por inflación. Mientras que por tenencia de títulos obtuvieron en mayo 16.714 millones de pesos, con un alza de 88,6 por ciento interanual, y acumulan 142.098 millones de rentabilidad por bonos, letras y acciones en cartera.
En contraposición, la intermediación financiera –administrar los depósitos para financiar préstamos– se congeló en medio del vendaval cambiario. La fuerte suba de la tasa de interés rectora que el Central aplicó para contener la corrida frenó el ritmo del financiamiento. “El saldo de crédito en pesos al sector privado se mantuvo en mayo en términos reales respecto a abril”, señala el informe. El aumento real interanual de las financiaciones totales a empresas y familias registró una mejora del 27,7 por ciento interanual (descontando la inflación). El saldo de los depósitos totales tampoco presentó cambios significativos. Las colocaciones en pesos del sector privado se redujeron 0,9 por ciento respecto de abril y mantuvieron un alza de apenas 11,3 por ciento en los últimos doce meses. Los créditos hipotecarios UVA volvieron a registrar una caída. “En junio (amplía la muestra el informe) el volumen operado de créditos al sector privado en UVA totalizó más de 7600 millones, reduciéndose con respecto a los meses anteriores”, advierte el Informe sobre Banco de la autoridad monetaria. El 72,6 por ciento del monto transado en créditos UVA correspondió a préstamos hipotecarios.