La tarde en que llovía…

No han pasado muchos días de que sucediera un acontecimiento histórico en la historia del deporte al aire libre en Comodoro Rivadavia. Se disputaron dos encuentros de fútbol bajo una lluvia demencial. Algo que jamás…

domingo 05/02/2012 - 12:00
Compartí esta noticia

No han pasado muchos días de que sucediera un acontecimiento histórico en la historia del deporte al aire libre en Comodoro Rivadavia. Se disputaron dos encuentros de fútbol bajo una lluvia demencial. Algo que jamás sucedió en casi 100 años de antigüedad en la práctica de ese deporte en estos lares.

La historia dirá que Guillermo Brown de Madryn llegó hasta Comodoro Rivadavia un viernes de enero para jugar dos encuentros amistosos, de pretemporada, enfrentando a Huracán y a la Comisión de Actividades Infantiles. El sábado amaneció lloviendo como hacia tiempo no se disfrutaba en la ciudad. El ajado Estadio Municipal de Barrio General Mosconi no se usa cuando llueve para cuidar su césped natural. Habitualmente esas condiciones climáticas obligan a suspender partidos. De hecho a pocas cuadras de allí, Boca de Rio Gallegos debió dejar sin efecto el que había programado frente a Jorge Newbery de Comodoro Rivadavia por las razones citadas.

¿Dónde comienza el mojón que dividirá la cronología? En la espontaneidad orgullosa de los dirigentes de Huracán, que hinchando pecho bajo los paraguas dijeron “Los jugamos ahora en nuestro campo de césped sintético”. Y el micro de Madryn, en vez de orientar el GPS hacia la zona de las ballenas, se dirigió hacia el Barrio Industrial. El que transportaba a Boca de Rio Gallegos, siguió hacia el sur del país.

Los partidos se disputaron normalmente. El césped sintético, que nos acerca al primer mundo, respondió como se esperaba. Los orientadores tácticos sacaron conclusiones, los jugadores pudieron comprobar como era eso de mojarse y no de sudor, algo que les va a servir porque en otros lugares no se suspende jamás por lluvia, los dirigentes sonrieron por el avance de la infraestructura y los analistas de esos encuentros, mezquinamente solo escribieron de táctica y estrategia. Dejando escondido bien arriba de las negras nubes lo mas importante. Lo destacable por sobre cualquier actitud de movimientos de jugadores dentro del campo o de los goles convertidos o errados.

Esto no puede pasar como pasaron esas nubes. Hay que destacarlo con una plaqueta recordatoria como “el día que se jugaron dos partidos normalmente pese a la lluvia”.

El análisis que merece quien lee, debe imprescindiblemente dejar en claro que solo la presencia del Estado pudo hacerlo posible. La concreción del colocado del césped sintético en las canchas de Huracán, pronto en Jorge Newbery y otras instituciones, es posible gracias a que desde el Estado se entendió que el tan mentado Mercado (los privados…) que tanto predican los neoliberales, nunca va a estar presente en este tipo de cosas porque no le es reedituable y, obviamente, no le interesa al Capital Salvaje que haya gente practicando deportes.

Es hora de que se contribuya a la infraestructura de todos los Clubes del Chubut con este tipo de elementos que son tan necesarios como los deportistas y dirigentes. Sin ellos no hay deportes. Paralelo a ello se debe generar el Gran Debate para que se delimite hasta donde debe el Estado, con el dinero de los contribuyentes, debe estar presente en el Deporte Profesional de Alta Competencia y en cuales de ellos.

Días atrás mientras algunos atletas disputaban la “Corrida Diario Crónica” con zapatillas prestadas por no poder comprarlas, Ricardo Fueyo dijo “Hace poco desde el estado se destinaban 600 mil pesos para un equipo de automovilismo. Esos recursos hoy van a ser destinados a quienes realmente lo necesiten”.

El Director de Deportes del Chubut ya había advertido públicamente al asumir que “vamos a ordenar la distribución de fondos. Hay deudas que heredamos que hará imposible que ayudemos a los Clubes, por lo tanto es necesario ordenar y transparentar el sistema”.

No faltará en ese debate las preguntas si desde el Estado debe gestionarse o directamente abonar el sueldo a  jugadores extranjeros—o nacionales—que representan a Clubes de esta provincia y cuya participación a nivel nacional no ha servido para que la cantidad de chicos que se acercaron a practicar esos deportes de elite, sea significativa. Por ej; vóley o basquetbol por citar a algunos.

La lluvia no fue impedimento para que se juegue normalmente al fútbol por primera vez y no se deteriore el escenario. Que esa misma lluvia lave de culpas a los que postergaron al deporte de Comodoro Rivadavia al negarle estas posibilidades. Pero que no humedezca las ideas de los que deben mostrar lo bueno y lo malo de lo que pasa. Que no se inunde el patio del silencio. Que no crezca la planta maldita del colaboracionismo. Que en definitiva, digamos lo que pasa, pero fundamentalmente porque pasa lo que pasa.

Por Ricardo Scazzino

Compartí esta noticia