El peruano hizo un posteo bastante subido de tono. ¿Dedicado a quién?
Luis Advíncula fue noticia en la última semana de Boca. Primero porque salió lesionado en el partido contra Racing en la Bombonera, segundo porque pese a eso viajó igualmente a Perú para sumarse a la selección de Ricardo Gareca, tercero porque finalmente terminó jugando ¡los tres partidos de Eliminatorias Sudamericanas!, tercero porque insólitamente volvió a la Argentina en un vuelo comercial y ahora tendrá que hacer siete días de aislamiento, y cuarto y último porque el lateral derecho de 32 años explotó en sus redes sociales…
El lateral peruano de 32 años explotó en sus redes sociales luego de volver al país tras las Eliminatorias.
«Por el amor de Dios, dejen de engañar a la gente y primero infórmense bien», fue el posteo en una historia de Instagram de Advíncula, que además agregó un insulto. Ahora bien, ¿a qué se debe esta reacción?
Sin dudas que llamó la atención la manera en la que Advíncula volvió a la Argentina, ya que al haber roto la burbuja sanitaria el jugador tendrá que estar aislado hasta la próxima semana, motivo por lo obviamente se perderá el partido de este martes contra Defensa y habrá que ver si puede estar contra Atlético en Tucumán el sábado, ya que recién el día anterior el peruano cumplirá con los siete días de aislamiento.
¿Hay enojo en Boca con Advíncula?
Lo que sí seguramente pueda existir es molestia de parte del Consejo de Fútbol de Juan Román Riquelme. ¿Por qué? Y porque de mínima habría hecho ruido el hecho de que el peruano no pudiera terminar el partido contra Racing y dos días después comenzará un raid de partidos ante Uruguay, Venezuela y Brasil, encuentros que disputó en su totalidad.
Emergencia, de momento, Sebastián Battaglia no tiene. Porque Marcelo Weigandt viene de ser una de las figuras del triunfo 2-1 de Boca en Rosario ante Central y porque a fuerza de buenos rendimiento se va ganando un lugar. Y mucho más ahora, que por lo visto Advíncula, el refuerzo de jerarquía que llegó para ser titular, deberá seguir esperando.