El Gobernador de Chubut, Mariano Arcioni, se refirió a la situación económica-financiera de la Provincia. “El 2020 fue un año muy difícil. Estamos endeudados en casi mil millones de dólares. Las cosas se resuelven con trabajo y mirando para adelante. Chubut siempre estuvo proyectada para ser sustentada económicamente con un barril de petróleo de 120-130 dólares y hoy eso es imposible”, sostuvo.
En este sentido, señaló que “hemos pasado por una situación muy difícil. El reordenamiento económico no es de un día para otro”
“Gracias al esfuerzo que hemos hecho durante el 2020, hoy podemos decir que avizoramos un 2021 en donde podremos hace frente a todas nuestras obligaciones”, dijo.
Asimismo, aclaró que “el precio del barril impactó mucho en las regalías hidrocarburíferas que percibe Chubut. Lo cierto es que durante los últimos tiempos tuvimos una depreciación bastante importante en el crudo”.
“El 2020 fue un año muy difícil. Estamos endeudados en casi mil millones de dólares por eso necesitamos reestructurar la deuda”, indicó.
En este marco, destacó que “hemos estado afrontando deudas, deudas que yo no tome pero sin embargo me hice cargo de eso”.
“El achicar la planta política y reducir el costo en la administración central, nos está permitiendo tener un oxígeno financiero para poder saldar absolutamente todo”, expresó el mandatario provincial.
A su vez, afirmó que “hemos tenido un acompañamiento muy importante por parte del Gobierno Nacional. Las cosas se resuelven con trabajo y mirando para adelante. Nosotros siempre fuimos respetuosos de la oposición. Pero la Provincia no fabrica plata, la Provincia vive de las regalías y de la coparticipación, es decir, si no hay consumo no vamos a tener dinero”.
“Chubut siempre estuvo proyectada para ser sustentada económicamente con un barril de petróleo de 120-130 dólares y hoy eso es imposible”, recordó.
También aseveró que “nosotros trabajamos para que el ciudadano sea digno por sobre todas las cosas. Por eso nunca hemos parado con la obra pública”.
Finalmente, Arcioni concluyó que “el inútil siempre busca culpas. El inteligente busca soluciones”.
