La actividad manufacturera no mostró señales de recuperación y en abril sólo creció el 27,8 % de las industrias, al tiempo que el uso de la capacidad instalada bajó a 57,5 % y solo 29,9 % de las empresas tuvo rentabilidad.
La producción de las pymes industriales cayó 10,3% en abril frente a igual mes de 2018 y bajó 4,3% cuando se la compara con marzo pasado, informó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
La actividad manufacturera no mostró señales de recuperación y en abril sólo creció el 27,8 % de las industrias, al tiempo que el uso de la capacidad instalada bajó a 57,5 % y solo 29,9 % de las empresas tuvo rentabilidad.
Los datos surgen de la Encuesta Mensual Industrial de CAME entre 300 firmas del sector en el país.
Según la entidad «hay dos datos positivos que fueron el crecimiento de 2,1 % anual en «papel, cartón, edición e impresión» y que se redujo levemente el plazo promedio de los cheques recibidos, aunque sigue alto en 60 días».
Desde el sector papel y cartón más empresas trabajaron con la demanda en alza y eso fue en parte porque ayudó el menor ingreso de importaciones y algunos pedidos que se activaron sobre fin de mes.
El Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) se ubicó en 80,4 puntos y acumuló un declive de 8,5 % en el primer cuatrimestre del año contra el mismo periodo de 2018.
«Los bajos niveles de consumo del mercado interno sumado a un mercado externo que tampoco encuentra dinamismo, están limitando toda posibilidad de recuperación de la industria. Los empresarios siguen achicando sus negocios, reduciendo costos y tratando de sostenerse esperando que el mercado se reactive», indicó.
Además, señaló que «en abril puntualmente, muchas empresas aprovecharon a liquidar sus stocks, con descuentos en algunos casos importantes para obtener liquidez, ya que muchas de las ventas que realiza el empresario se remunera con cheques a plazos largos que por las tasas se evitan cambiar».
El descenso más profundo en la comparación anual se dio en: Calzado y marroquinería (-24,6%), donde la caída del consumo, que afecta la demanda de esos productos, se ve además reforzada por las desventajas que tiene el productor local para competir con el artículo importado.
Otros ramos muy afectados en abril fueron material de transporte, con una declinación anual de 24,2%, Productos minerales no metálicos (-22,6%), Productos de madera y muebles (-21,2%), Productos de caucho y plástico (-13,9%), y Productos Electro-Mecánicos e informáticas (-12,2%), Fabricación de productos de metal, maquinaria y equipo (-9,5%) y Productos textiles y prendas de vestir (-8,8%).
En tanto, los declives más suaves fueron Alimentos y bebidas (-2,7%), y Productos químicos (-4,6%).
«Si bien las importaciones vienen cayendo fuerte, en sectores como Muebles, Calzados y Textiles, el producto importado desplaza igualmente al nacional por los altos costos de fabricación interna, lo que agrava el descenso», precisó la CAME.
«En nuestro sector hay muchas pymes vendiendo stocks acumulados y descapitalizándose», explicó la Cámara Argentina de Fabricantes de Muebles, Tapicerías y Afines de la Argentina.