La Policía lo obligó a hacer 300 sentadillas y falleció

Un filipino de 28 años violó las restricciones dispuestas en su país ante el COVID-19 para ir a comprar agua y como castigo, la Policía lo obligó a hacer 300 sentadillas. Un día después, el…

miércoles 07/04/2021 - 1:26
Compartí esta noticia

Un filipino de 28 años violó las restricciones dispuestas en su país ante el COVID-19 para ir a comprar agua y como castigo, la Policía lo obligó a hacer 300 sentadillas. Un día después, el joven falleció.

El hecho ocurrió en la ciudad de General Trias, en la isla de Luzón, la cual se encuentra baja un estricto estado «de cuarentena comunitaria mejorado», que incluye un toque de queda de 18 horas a 5 de la mañana, detalla LMNeuquén.

El jueves de la semana pasada, la víctima fatal, identificado como Darren Manaog Peñaredondo, incumplió la norma por algunos minutos para ir a comprar agua potable, según indicaron fuentes del medio local Rappler.

La pareja del muchacho, llamada Reichelyn Balce, comentó que su novio y otro hombre, que presuntamente también había violado el límite horario, fueron «llevados a la Plaza Malabon, frente a la alcaldía municipal, y luego les dijeron que hicieran 100 ejercicios físicos».

Las autoridades, según el relato de la chica, supuestamente indicaron que los afectados se verían obligados a repetir los ejercicios si no estaban sincronizados. Aparentemente, los muchachos demoraron en mostrarse en sintonía y finalmente, cada uno debió realizar 300 sentadillas.

Peñaredondo llegó a su domicilio a las 8 de la mañana del día siguiente y apenas podía moverse sin ayuda por el dolor que padecía en sus rodillas y muslos. Además del cansancio, el joven comentó que durante el castigo, se había caído «varias veces».

«Todo ese día, luchó para caminar, se arrastraba por el piso, gateaba y le costaba levantarse. Cuando pidió ayuda para ir al baño, empezó a tener convulsiones, su rostro se puso violeta y su corazón dejó de latir», detalló Balce en un posteo que compartió en Facebook. Un vecino le hizo reanimación cardiopulmonar y lo mantuvo con vida hasta llevarlo al hospital, Tras un día en coma, el muchacho pereció.

«Adiós, te queremos mucho. No permitiremos que no se haga justicia por su pérdida», concluyó su mensaje la novia de la víctima.

El jefe de policía de la ciudad, el teniente coronel Marlo Nillo Solero, aseguró ante la prensa que no existía tal castigo para las personas que violaran las restricciones. «En cambio, llevamos a cabo conferencias», sostuvo.

Por su parte, el alcalde de General Trias, Antonio Ferrer, confirmó en un comunicado que se estaba llevando a cabo una pesquisa: «Inmediatamente, ordenamos al jefe de nuestra Policía que realizara una investigación justa sobre el incidente y la supuesta tortura. Espero que podamos tener claridad inmediata sobre los eventos y dar tranquilidad a la familia».

Esta no es la primera vez que la fuerza de seguridad filipina es acusada de trato inhumano por violar las resoluciones por la epidemia: el mes pasado, Human Rights Watch publicó un informe y detalló que los infractores son puestos en jaulas para perros y obligados a sentarse al sol. En tanto, la semana pasada, el presidente del país, Rodrigo Duterte, advirtió que cualquiera que desatendiera las medidas de salud pública podría ser «fusilado» aunque luego, el Gobierno aclaró que no fue literal su anuncio.

En cuclillas por no utilizar barbijo

El reconocido empresario indio Ahan Mahindra compartió en su cuenta de Twitter un polémico video en el que mostró que la Policía de Bombay, en India, castiga a las personas que no usan tapabocas: por incumplir la norma sanitaria, los afectados son obligados a caminar en cuclillas por la calle. Las imágenes provocaron una gran indignación en el país asiático, teniendo en cuenta las altas temperaturas que aún persistían en los últimos días.

Compartí esta noticia