La polémica abre el encuentro entre el nuevo Papa y la Presidente

Dirigentes de la política nacional se refirieron al histórico momento en que Francisco recibirá a Cristina Fernández, quien supo estar enfrentada al ex Arzobispo de Buenos Aires. Algunos creen que es momento de unidad y…

domingo 17/03/2013 - 15:00
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Dirigentes de la política nacional se refirieron al histórico momento en que Francisco recibirá a Cristina Fernández, quien supo estar enfrentada al ex Arzobispo de Buenos Aires. Algunos creen que es momento de unidad y otros que no habrá reconciliación.

La llegada de la comitiva nacional al Vaticano tendrá un marco histórico debido a que sus doce miembros presenciarán el martes la asunción del primer papa argentino, Jorge Bergoglio.  

Además de la presidente Cristina Kirchner, quien será recibida por Francisco el lunes en un encuentro privado, viajarán a Roma otros miembros del Gobierno, la Corte Suprema de Justicia, el Congreso Nacional, la Iglesia y dirigentes gremiales.

Respecto de lo que será el nuevo papado de Francisco, se pronunciaron hoy diversas personalidades de la política, la justicia y los gremios.

El titular de la Corte, Ricardo Lorenzetti, aseguró que el nombramiento de Mario Bergoglio como Sumo Pontífice de la Iglesia católica «promete un futuro» y señaló que la elección del nombre Francisco anticipa «un deseo de cambiar el orden» vigente.

En este sentido, apuntó que «llamarse Francisco está lleno de significaciones. Es uno de los grandes símbolos de la Iglesia que la trasciende, porque no es neutro y significa una opción por los pobres, la igualdad y la ecología«.

«Porque Francisco siempre evoca un deseo de cambiar el orden, por evangelizar y transmitir una verdad en la que se cree», agregó en la columna que hoy se publicó en la revista Noticias.

En el mismo sentido, el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Horacio de Mendiguren, consideró que la reunión que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner mantendrá el lunes con el Sumo Pontífice «va a ser muy buena»,  y aseguró que el nuevo Papa «nunca quiso ni se puso como jefe de la oposición».

De Mendiguren se mostró confiado en que la elección de Bergoglio al frente de la Iglesia Católica servirá para «unirnos a todos» los argentinos y resaltó que el ex arzobispo porteño «está convencido que el desarrollo es el nuevo nombre de la paz».

Por su parte, el titular de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre), Gerónimo “Momo” Venegas señaló que la visita de Cristina Kirchner al nuevo Papa no modificará el rumbo político del país.

“Yo creo que puede haber un cambio para estar con él, pero no en las políticas de Estado, que no existen”, dijo el dirigente gremial en diálogo con Radio Blue.

“Este país tendría que tener políticas de Estado, en primer lugar para erradicar la pobreza, que es el problema más serio porque genera la delincuencia, la prostitución, el alcohol, la droga. No lo genera porque el pobre tenga que ser adicto, sino es por la impotencia de no poder solucionar sus problemas”, consideró Venegas, en alusión a la problemática a la que hizo referencia Jorge Bergoglio con la elección del nombre Franciso.

«Me puedo considerar uno de los amigo del papa, hace
muchísimos años que charlamos y venimos mirando las cosas que pasan en el país», manifestó Venegas en diálogo con la radio FM Blue.

El lider de Uatre, quien dijo haber donado los fondos de su viaje al Vaticano a una parroquia porteña, negó que el encuentro de la mandataria con el Sumo Pontífice signifique una reconciliación, luego de los enfrentamientos que distanciaron al Gobierno de la Iglesia, cuando Jorge Bergoglio era Arzobispo de Buenos Aires.

“Ella debería decirle a los kirchneristas rentados que no ensucien la figura del Papa, y no preocuparse por viajar inmediatamente”, agregó.

Distinta reacción tuvo el intendente de San Isidro, el radical Gustavo Posse, quien también destacó la importancia del encuentro que mantendrán el lunes el papa Francisco y la presidente argentina. En declaraciones a radio Mitre, el jefe comunal alineado con el macrismo, aseguró: “Es una acción de paz, de integración”.

Por su parte, el presidente del bloque de diputados nacional del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, sostuvo:“No creo que la designación de Francisco vaya a cambiar el giro de la política interna. El parámetro con los que hay que medirlo son parámetros distintos a los que uno mide cualquier hecho político en el interior de la República Argentina”.

“Se trata de un papa que proviene de un país de América Latina que ha tenido posiciones claras como, por ejemplo, con cuestiones referidas al  colonialismo, Malvinas y sobre la situación financiera. Esa impronta va a estar presente en todo lo  que vaya  a hacer”, agregó, en diálogo con radio La Red.

«No es el momento de hacer una mirada que tenga que ver con la política interna de nuestro país porque sería parcial y lo ubica en un lugar que no es el que tiene hoy. Por el lugar que tiene hoy hay que medirlo con coordenadas distintas, tanto que son desconocidas para la República Argentina. Se trata de un hecho inédito”, concluyó.

Niegan vínculos del nuevo Papa con la dictadura

El ex fiscal Julio Strassera, reconocido por la acusación en el histórico juicio a las juntas militares, consideró hoy «una canallada» la intención de algunos sectores del oficialismo de vincular al cardenal Jorge Bergoglio, actual Papa Francisco, con la dictadura.

«Todo esto es una canallada, absolutamente falso, en todo el juicio no hubo una sola mención y en el Nunca Más menos a Bergoglio», afirmó Strassera.

Y acusó al kirchnerismo de ser «tan megalómanos tanto los partidarios como la presidente» Cristina Fernández.

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