La actividad aumentó a 4,5 puntos porcentuales su participación en la generación de riqueza. Significó un salto de medio pp respecto de 2009, al producir por el equivalente a $27.286 millones y exportar por $13.822 M, tras invertir 10.852 millones. Explican por qué se explota a cielo abierto.
Representantes de la minería reunidos en la Cámara Argentina de Empresarios Mineros destacaron en un encuentro con la prensa el rol activo que tiene y profundizará el sector en los próximos años, dadas las amplias riquezas que ofrece la geografía desde norte a sur y el «carácter imprescindible de los minerales para producir todos los bienes que necesitamos para vivir, desde los alimentos, fertilizantes, hasta los utensilios de cocina y computadoras y TV», explica la CAEM.
En una charla informal, con motivo de la celebración del Día del Periodista, los máximos referentes del sector justificaron la explotación a cielo abierto porque «“existen minerales cuya concentración en la tierra es baja».
Además, «los nuevos yacimientos de minerales como la bauxita (aluminio), el oro, la plata o el cobre no tienen generalmente forma de veta, como existía antiguamente, sino que están dispersos en tierra y roca», restalta un trabajo de la CAEM.
Preconceptos erróneos
Una pelea que está dispuesta a dar el sector es quebrar el prejuicio dominante sobre que la actividad minera contamina, ya que no sólo «para comenzar a producir, toda producción minera realiza previamente el informe de impacto ambiental, que son públicos, sino que se lo actualiza cada dos años, sino que todas las empresas realizan remediación y cierre planificado de mina, mitigando los impactos ambientales», dijo Manuel Benítez, presidente de CAEM.
Al respecto, resaltan los máximos ejecutivos de CAEM que «durante el auge que estamos viviendo de la minería moderna de los últimos 15 años, no hay casos de contaminación del medioambiente».
También explican los expertos que «las empresas no contaminan el agua, ni derraman efluentes contaminantes del ambiente, y está obligada a reponer la misma cantidad de agua consumida, de manera de afectar poblaciones, cultivos, flora y fauna».
Asimismo, resaltan que «la minería no actúa sobre los glaciares. Y cuando hay presencia de hielos extrema los cuidados, como por ejemplo la emisión de polvo, que son examinados constantemente por organismos públicos y especialistas».
