La Argentina volvió a registrar en marzo la inflación más alta de América latina, al triplicar en términos anuales y cuadruplicar en términos mensuales la suba de precios registrada en Venezuela.
El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), el think tank que difunde cifras creíbles del país gobernado por Nicolás Maduro, precisó que “en marzo, la tasa de inflación se situó en 3,9%, mayor que la del mes pasado cuando los precios cayeron en promedio 0,5%”.
Además, afirmó que “las tasas de inflación acumulada y anualizada se ubicaron en 7,8% y 89%, respectivamente”. Por su parte, el Banco Central venezolano informó una suba de los precios del 1,2% el mes pasado, 4,1% el primer trimestre y 67,7% el último año.
En el caso de la Argentina, las estadísticas de las consultoras privadas se situaron entre el 11 y el 13 por ciento para el mes pasado y en torno del 285 y el 300 por ciento para los últimos 12 meses, según la metodología utilizada.
Mañana se conocerá el índice de precios de la Ciudad de Buenos Aires y el viernes el del Indec a nivel nacional. El ministro Luis Caputo afirmó -según publica Infobae– que la inflación “ya corre a un dígito”, ya que el Gobierno analiza la suba de los precios sin los ajustes estacionales.
En cuanto a Venezuela, se precisó que “en Caracas la tasa de inflación fue 2,2%” y se indicó que “desde el punto de vista de los componentes del índice de precios, los alimentos aumentaron 4,8%, el transporte 4,6%, las comunicaciones 4,2% y el rubro equipamiento del hogar 4%”.
De este modo, “el alza de los precios de los alimentos explica el 18% del aumento general de los precios”.
“Esta aceleración de la inflación ocurrió en un contexto donde la liquidez monetaria se expandió 18,2% en el mes y 215% en términos anualizados y no obstante la estabilidad que mostró el tipo de cambio el cual aumentó 0,36% en marzo y 29% con relación a marzo de 2023″, indicó el OVF.
“Claramente la política cambiaria, con particular énfasis en 2024, tiene como objetivo estabilizar al tipo de cambio y se ha logrado hacerlo. Sin embargo, hay que tomar en consideración que tal política encara riesgos muy importantes cuando la inflación local no disminuye rápida y significativamente”, advirtió el informe.
Así, “al tomar en cuenta el tipo de cambio real, es decir, el tipo de cambio nominal ajustado por los diferenciales de inflación doméstica e internacional se aprecia el problema”.
De este modo, “mientras que en marzo la tasa de inflación internacional anualizada se ubicó en el entorno de 3,5%, los precios en Venezuela subieron 89%”.
“Ello quiere decir que los bienes producidos localmente son más caros respecto a los importados, situación que le resta capacidad competitiva a la economía, al tiempo que comprime la demanda agregada y el crecimiento económico”, explicó el Observatorio.
“Tarde o temprano el atraso del tipo de cambio se tendrá que corregir como siempre ha sucedido en Venezuela y en todas las economías cuando la tasa de cambio no es sostenible”, advirtió, en una referencia que también muchos analistas efectuaron sobre la Argentina. Esto se debe a que el tipo de cambio oficial se desliza al 2% mensual mientras que la inflación sube dos dígitos por mes y recorta la competitividad ganada con la devaluación de diciembre pasado.
Los precios en la Argentina
En cambio, las consultoras marcaron un promedio del 13% para el mes pasado. En particular, el relevamiento de precios minoristas de C&T “para la región GBA presentó un alza mensual de 12,7%, menor que el 16,3% de febrero y el 15% que el INDEC había difundido para la región. La variación de doce meses se ubicó en 295,3%”.
“La inflación núcleo fue más baja que la total, 10,9%, por la fuerte presencia de aumentos estacionales y regulados”, precisó el informe de la consultora que dirigen María Castiglioni y Camilo Tiscornia.
“A lo largo del mes los aumentos de precios fueron perdiendo impulso, bajando la inflación total de la cuarta semana del mes a 10,7% y la núcleo a 8,8%”, destacó.
En particular, informaron que “Educación fue el rubro de mayor incremento por el alza de los colegios ante el comienzo de los clases, un comportamiento estacional habitual; le siguió vivienda, influido por el incremento de la electricidad que arrancó a mediados de febrero y que, por ende, también impactó en marzo”.
Por su parte, “Salud se movió en forma similar, principalmente por un nuevo ajuste en las prepagas. Los medicamentos replicaron el comportamiento de febrero. Y el rubro de Bienes y servicios varios estuvo movido por el mayor precio de los cigarrillos. En artículos de tocador y belleza se vio una moderación respecto de febrero”.
En tanto, “Alimentos y bebidas aumentó 10,8%, algo menos que en febrero, con marcadas moderaciones en la gran mayoría de los componentes. Mucho del comportamiento del rubro se vio influido por una fuerte alza de las verduras”.
“En transporte y comunicaciones hubo un importante freno porque no volvió a tener lugar un incremento del transporte público como el que se había registrado en febrero”, detalló.
Por su parte, Econométrica indicó que la inflación del mes pasado fue del 11,5% y la de los alimentos del 9,6%.
Además, estimó que llegará al 168% para este año, frente al promedio del 210% calculado por la mayoría de las consultoras consultadas por el Banco Central en el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM).
En cambio, la Encuesta del Mercado publicada por el OVF marca un 62% en Venezuela para diciembre próximo.
Para ECO GO, la inflación del mes pasado fue del 13,1%, del 54,4% en el primer trimestre y del 303,6% el último año. Los rubros que más subieron en los últimos 12 meses, según el estudio que dirige Marina Dal Poggetto, fueron alimentos con 342%, Salud 334% y Educación 321%.
Según Econviews, la suba de los alimentos de la primera semana de abril fue del 0,8% y la inflación terminaría en el 10% mensual y 297% anual.