La cifra continúa a la baja y reflejó la variación mensual más chica desde enero de 2018 con un 2%. En la Patagonia fue incluso menor con un 1,8%.
En un nuevo síntoma de desaceleración, la inflación de febrero fue del 2%, la más baja desde enero de 2018, según el Índice de Precios del Consumidor (IPC) difundido este jueves por el INDEC. El mayor incremento se dio en el rubro Restaurantes y Hoteles, influído por la temporada alta y el fin de las vacaciones, con una variación del 3,1%. En segundo lugar se ubicó Alimentos y Bebidas, el rubro con mayor incidencia en el nivel general de inflación, que también registró un aumento por encima de la media, llegando al 2,7%.
Por el contrario, las menores subas se dieron en Vivienda (0,6%) y en Salud (0,4%). El congelamiento de tarifas y de medicamentos, sumado a la estabilidad en el costo de las prepagas, resultaron factores clave para explicar estos bajos niveles. Por debajo del nivel general también se posicionaron Transporte y Educación, con ascensos del 1,6% y del 1,4%, respectivamente.
Si se analizan los resultados regionalmente, puede observarse que la inflación fue menor al promedio en el Gran Buenos Aires (GBA), en el Noroeste (NOA) y en la Patagonia, ya que percibieron una variación del 1,8%. Cabe destacar que, en el NOA, los precios del rubro Vivienda, agua, electricidad y combustibles bajaron un 3,7%, indica El Patagónico.
En el resto del territorio argentino, la suba de precios superó el 2%, destacándose un salto del 4,6% en el rubro Recreación y Cultura de Cuyo, y un fuerte incremento del 5,8% en Educación del Noreste.
En el primer bimestre del año, la inflación acumula un 4,3%; Alimentos y Bebidas lidera el índice con un aumento del 7,5%, seguido por Restaurantes y hoteles y por Recreación y Cultura, con subas del 7,4% y del 7,3%, respectivamente. De manera inversa, Vivienda (1,3%), Equipamiento del Hogar (0,8%) y Salud (-1,6%), muestran los indicadores más bajos.
Por su parte, la inflación interanual (respecto a febrero de 2019) fue del 50,3%; Salud (59,6%), Prendas de vestir y calzado (56,6%) y Equipamiento y mantenimiento del hogar (56,3%) lideraron el IPC en el período en cuestión. El nivel de febrero se situó en torno a las estimaciones privadas. La consultora de Orlando Ferreres había previsto un 1,9%, mientras que el Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET) esperaba un 1,7%.
Adicionalmente, la semana pasada el Banco Central (BCRA) dio a conocer su relevamiento mensual de expectativas de mercado (REM), en el cual la inflación esperada para 2020 bajó al 40%. Sin embargo, según las estimaciones de las consultoras y entidades financieras más precisas (incluídas en la nueva metodología), los precios aumentarían un 39,3% durante el año en curso.
La merma en la suba de precios es una variable fundamental para la autoridad monetaria, ya que es una de las justificaciones para el recorte en la tasa de interés de referencia, que ya acumula 25 puntos porcentuales con la nueva gestión de Miguel Pesce. Por el momento, la misma se sitúa en el 38%.