La falta de gestión hace que Rada Tilly este cada vez más colapsada

Los vecinos alertan sobre el colapso del sistema cloacal, la contaminación de algunos espacios naturales, la saturación de las redes eléctrica, de gas y de agua potable, el crecimiento de un basural que impacta el…

lunes 28/11/2011 - 15:00
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Los vecinos alertan sobre el colapso del sistema cloacal, la contaminación de algunos espacios naturales, la saturación de las redes eléctrica, de gas y de agua potable, el crecimiento de un basural que impacta el ambiente y la acumulación de los residuos urbanos. También señalan establecimientos educativos superpoblados y falta de personal policial y de salud como algunos de los problemas que enfrenta una localidad que pasó de los 6 mil habitantes en 2002 a más de 12 mil el año pasado.

Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, Villa Rada Tilly pasó de los 460 habitantes en 1970, a los 1.618 en los 80, 2.940 en los 90, 6.208 en 2002 y finalmente 12.083 el año pasado. Expresado de otro modo, ha visto duplicar su población de forma sostenida en los dos últimos censos, con lo que de villa –palabra usada para denominar poblados pequeños, alejados u habitados en períodos de vacaciones- ha pasado a ser una ciudad que continúa recibiendo personas que la eligen como su espacio en el mundo, a la que se suman otras miles que transcurren allí la temporada estival.

Según informó diario Crónica sacan a la luz los reclamos frecuentes de algunos ciudadanos de esa localidad, la cuasi explosión demográfica que ha experimentado ha traído consigo las dificultades de muchos aglomerados urbanos, especialmente la contaminación de algunos espacios naturales como la playa y la laguna, y el colapso, la saturación o la deficiencia de algunos servicios públicos, entre el de cloacas, el de agua, el de energía eléctrica, el de seguridad, el de salud, el de educación, el de recolección de servicios y el de higiene urbana. Todo esto acompañado de gestiones estatales que no han logrado acompañar el desarrollo poblacional.

El problema que más inquieta
La generación cada vez mayor de residuos cloacales que están superando la capacidad de tratamiento que tiene la planta y generando además derrames frecuentes en distintos sitios de la ciudad, incluyendo las avenidas principales y llegando incluso a la playa, es uno de los temas que más inquieta a muchos vecinos. Los sitios con desbordes más frecuentes son la avenida Seguí, entre Brown y Comodoro Rivadavia, y la bomba colectora de Comodoro Rivadavia y Armada Argentina.

Cabe recordar, que hace aproximadamente 4 años, antes de que Cooagua entregase la concesión del servicio de cloacas a la SCPL, se hizo un relevamiento que dejó entrever la falta de mantenimiento y la necesidad, nunca satisfecha luego, de realizar una readecuación del servicio y las plantas de bombeo.

En Rada Tilly, todos los efluentes van desde los hogares por bombeo a una planta de tratamiento, diseñada y puesta en funcionamiento por el Consejo Federal de Inversiones en 1998, la cual necesitaría una ampliación ya que estaría desbordada en su capacidad de trabajo. Es que según datos extraoficiales, que fueron ratificados por el concejal por la Unión Cívica Radical, René Uribe, la ciudad estaría produciendo diariamente tres mil metros cúbicos de residuos cloacales, de los cuales la planta solo podía tratar entre mil quinientos y mil ochocientos.

El CFI señalaba en su momento que el agua tratada debería ser volcada al mar, tras la ejecución de una obra que instalaría una colectora desde el tanque de agua tratada de la zona norte hasta el arroyo La Mata, unos 600 metros de cañería que nunca se colocaron.

Es así que actualmente las aguas servidas, tanto las que logran ser tratadas como las que no, exceptuando cerca de 400 metros cúbicos diarios que se recuperan para riego, se volcarían en la laguna que ha aumentado su tamaño tapando dos ingresos de camiones y constituyéndose como un gran foco infeccioso.

“La inversión de la cañería al mar la tenía que haber hecho Cooagua que era en ese momento la prestataria del servicio, pero como no gastó un solo peso porque dice que la tarifa no le daba, por lo menos lo tendría que hacer el municipio a través de Rentas Generales, si no es una inversión millonaria. Además habría que hacer una multa a la prestataria, actualmente la SCPL, por cada derrame que ocurra”, opinó Uribe.

El aumento en la construcción de edificios también estaría impactando por el peso de los edificios sobre las napas freáticas, contaminadas por los antiguos pozos negros que algunas viviendas aún conservan. En algunos casos, el agua resultante de esta presión en el suelo es bombeada al mar por los propietarios de esas construcciones, contaminando así la costa con Escherichia coli.

Poco para muchos

La sobrepoblación de personas conectadas a las redes de los servicios públicos también viene generando conflictos en el suministro del agua a cargo de Cooagua y la energía eléctrica a cargo de la SCPL, que han producido perjuicios económicos a los vecinos.

“Con la luz Rada Tilly ya parece un arbolito de navidad. Con el tema de los edificios hay un consumo excesivo de las líneas de electricidad, entonces hay horas pico en las que hay subidas y bajadas de tensión permanentes, con pérdidas de equipos como computadoras y heladeras, porque seguimos teniendo el mismo nivel de ramificación que hace 20 años casi sin inversiones por parte de la cooperativa”, reclamó un habitante de la zona céntrica, al tiempo que añadió: “tampoco ha habido una ampliación de la red de gas, y los cortes y las bajas en la presión del agua son frecuentes hace varios veranos”.

“Tenemos más barrios, más gente y menos servicios”
, afirmó, reclamando la necesidad de revisar el comportamiento de las instituciones intermedias que operan los servicios públicos.

Más seguridad, salud y educación

Otros servicios públicos que necesitan una ampliación son la custodia policial, la atención sanitaria y la educación. Es así que los habitantes de la villa han destacado la necesidad de sumar una escuela más a la secundaria y las dos primarias que existen, y de ampliar las vacantes en el jardín municipal, en las salas no obligatorias.

También, resaltaron la falta de personal en el Hospital dependiente del gobierno provincial. “Hemos ido un sábado con mi hijo con las dos piernas quebradas y tuvimos que terminar en La Española porque no tenían los medios para hacer las radiografías”, comentó la mamá de un niño que posee una discapacidad motriz.

En cuanto a la Policía, la concejal Dolores Álvarez resaltó que se mantenía casi la misma cantidad de efectivos que hace 15 años, con solo cuatro oficiales, con el deber de garantizas la seguridad desde Cerro Dragón hasta Ramón Santos.

El basural
Existe en Rada Tilly una escombrera que desde 1997 funciona, por ordenanza, como el centro de descarte de desechos de la comuna vecina en un predio ubicado a metros de la rotonda del cruce de las rutas 3 y 26. Su cercanía con algunos barrios de la localidad, como El Mirador y Solares, afecta a quienes allí residen, lo que motivó reiteradas veces cadenas de reclamos por los malos olores y las emanaciones de humo, y preocupación por la contaminación.

A espaldas de la ciudad, el basural potencia su impacto sobre el ambiente y las viviendas cuando el viento sopla desde el Oeste. Los residentes se quejan además por la plaga de moscas que ingresan a los hogares.

“La solución es la que estamos esperando en toda la región, que es la construcción de la planta de tratamiento. Nosotros tenemos un convenio firmado con provincia por el que somos parte del plan de eliminación de basurales a cielo abierto, eso es lo que estamos esperando y vamos a trabajar con Comodoro Rivadavia conjuntamente para la solución de esto que es un problema regional, no local. La planta de Comodoro está paralizada ahora y tenemos que seguir gestionando”, indicó hace algunos meses el secretario de Obras Públicas e intendente electo, Luis Juncos.

Una ciudadanía descreída
Tanto ediles como ciudadanos destacaron cierta apatía de la población a la hora de reclamar por las situaciones que le aquejan. Esta situación se hizo evidente durante la última audiencia pública del Ente Regulador de Servicios Públicos, en la que los vecinos, pese a su disconformidad con estas prestaciones, no se presentaron de forma masiva. Menos de una decena de ellos se acercó a escuchar al único orador que se había inscripto.

“La gente está cansada de peticionar y que esa petición no obtenga respuesta como corresponde”
, expresó un radatillense.

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