La escalofriante y sobrenatural experiencia de Fantino en su casa: “Algo raro pasó”

Ocurrió mientras leía un libro de historia medieval. El conductor relató su vivencia ante la atónita mirada de sus panelistas. “Si vos sos impresionable con estas cosas, bancala”, abrió Fantino su programa en América TV. Antes de comenzar…

martes 06/07/2021 - 22:16
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Ocurrió mientras leía un libro de historia medieval. El conductor relató su vivencia ante la atónita mirada de sus panelistas.

“Si vos sos impresionable con estas cosas, bancala”, abrió Fantino su programa en América TV. Antes de comenzar con la agenda diaria, el conductor quiso dedicarle unos minutos a narrar una escalofriante experiencia que vivió por la madrugada en su casa, describe La Nación.

Su pareja estaba en la Ciudad de Buenos Aires y él se había quedado solo en su casa en Tigre. Acompañado por sus mascotas, el conductor se retiró a su oficina para leer Tratado sobre la caída del demonio, un texto escrito por Anselmo de Canterbury. Alumbrado únicamente por la tenue luz de un velador y junto a sus perros, abrió el antiguo libro y comenzó su lectura.

Pero conforme pasaban los minutos, las cosas empezaban a salirse de control. “2:15 de la mañana escucho que hablan en la habitación donde duermo. Voy… televisor prendido”, relató. “Dije: ‘Bueno, me lo habré olvidado’”, agregó. Alejandro Fantino apagó la TV y volvió a su oficina. “Cuando estoy saliendo del pasillo… televisor prendido abajo. Bajo la escalera… TV prendido en el living y en la cocina, literal”, indicó.

Dispositivos apagados y cierto misterio por lo que sucedía, el periodista volvió a su sala de lectura, se sentó en su sillón y siguió leyendo. Un par de líneas alcanzaron para que se desatara el segundo hecho escalofriante de la noche. “Empezaron a ladrar los perros como si hubiese entrado alguien a casa, nunca habían ladrado así”, rememoró.

Pero las cosas no terminaron ahí. Con todo aparentemente controlado, el conductor insistió una vez más: “Doy vuelta la página y cuando aparece la imagen del propio demonio, la lora gira la cabeza, se le abren las alas y vuela por toda la oficina”, contó al aire.

Ese fue el evento que determinó el fin de la lectura nocturna. Con un poco de miedo y cansancio, fue a su habitación para dormir. “El velador estaba titilando. Me dormí y soñé cosas horribles. Me levanté con el estómago revuelto. Como decían los medievales, cuando el demonio quería entrar a tu cuerpo y lo rechazabas, quedabas con mal estómago. Algo raro pasó…”, finalizó.

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