Lo resolvió el presidente de la Cámara Federal, Martín Irurzun, quien debía definir si el expediente quedaba en manos de Ercolini o pasaba a Claudio Bonadio.
La denuncia que motorizó el fiscal Carlos Stornelli contra el falso abogado Marcelo D’Alessio y un presunto complot para voltear la causa de los cuadernos seguirá, por ahora, en manos del juez federal Julián Ercolini. Así lo resolvió el presidente de la Cámara Federal, Martín Irurzun, al dirimir una puja entre Ercolini y su colega Claudio Bonadio sobre quién tiene que llevar el expediente. Para Irurzun, es «prematuro» definir el tema y por lo tanto entendió que cada uno debía seguir adelante con su causa.
El dato no es menor: Ercolini fue el que le había pedido originalmente al juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, que se declarara incompetente de seguir interviniendo porque la extorsión al empresario agropecuario Pedro Etchebest le tocaba investigarla a Comodoro Py 2002.
Justo por estas horas, la Cámara Federal de Mar del Plata se prepara a resolver si Ramos Padilla seguirá en el caso D’Alessio. El fiscal de Mar del Plata Eduardo Pettigiani respaldó al fiscal Juan Pablo Curi para que la investigación que se instruye en Dolores pase a Comodoro Py, en consonancia con el reclamo de las defensas de Stornelli y del propio D’Alessio y contra el criterio de Ramos Padilla y la mayoría de las querellas.
Resuelva lo que resuelva en los próximos días la Cámara de Mar del Plata, la suerte sobre el lugar donde quedará la causa promete responderse en la Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal, en donde es difícil predecir qué resolución se tomará. Ya rechazó por lo pronto un pedido de Stornelli para analizar la recusación de Ramos Padilla.
En los primeros días de febrero, apenas estalló en Dolores el escándalo de D’Alessio, Stornelli denunció a ese supuesto abogado por haberlo «girado», es decir, haber pedido plata en su nombre. Por sorteo el caso cayó en manos de Ercolini, quien delegó el expediente en la fiscal Alejandra Mangano. La funcionaria promovió medidas y tomó declaraciones, entre ellas las del fiscal de Mercedes Juan Ignacio Bidone, suspendido e imputado también en Dolores. Y Ercolini le pidió a Ramos Padilla la causa.
Pero imprevistamente Stornelli –llamado a declarar como sospechoso en Dolores y declarado en rebeldía por no presentarse– amplió su denuncia: pidió que además de esa extorsión se investigue si había un complot en su contra para voltear la causa de los cuadernos.
Justamente, esa hipótesis fue la que sostuvo la diputada Elisa Carrió en una denuncia de los primeros días de febrero. Presentó copias de unas escuchas a detenidos kirchneristas registradas en la cárcel de Ezeiza, dispuestas en el marco de otra investigación penal. Según trascendió, esas grabaciones deberían haber sido destruidas.
La acusación de Carrió apuntó contra la ex presidente Cristina Kirchner, al ex embajador Eduardo Valdes, a D’Alessio, a los ex comisarios Ricardo Bogoliuk y Aníbal Degastaldi, y al juez federal de Dolores Alejo Ramos Padilla, entre otros. Ese caso está en manos del juez Bonadio, quien iniciará una licencia (entre el 1 y el 15 de mayo) y será reemplazado momentáneamente por el juez Sebastián Casanello para todas sus causas.
A raíz de la ampliación de la denuncia de Stornelli, Ercolini entendió que el tema debía investigarlo Bonadio, pero el magistrado lo rechazó. Y se planteó un conflicto que hoy resolvió el juez Irurzun. En una resolución a la que accedió Infobae, Irurzun aseguró que «puede afirmarse que el envío (de Ercolini a Bonadio) resulta prematuro».
Irurzun le dio la derecha a Bonadio al señalar que «el incipiente estado en el que se encuentra la causa de su registro impide a esta altura sostener la conveniencia del trámite conjunto de los actuados, restando aún efectuar diligencias que permitan encuadrar correctamente los eventos y, eventualmente, establecer las conexiones que resulten pertinentes».
«En razón de lo expuesto y sin perjuicio de que con el avance de la investigación tenga lugar un nuevo planteo, corresponde que sea el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal nro. 10 (Ercolini) el que prosiga entendiendo en estas actuaciones», aseguró.
Además de estas causas que siguen Bonadio y Ercolini, en Comodoro Py existe otra causa con el nombre de D’Alessio: la que sustancia el juez Luis Rodríguez por la presunta extorsión de ese falso abogado al empresario Gabriel Traficante, ocurrida en 2016. Como esa es una de las maniobras que se analizan en Dolores, Ramos Padilla también pidió a Rodríguez que le mande su causa.