El presidente del Instituto de Asistencia Social, Marcelo Diz, se ha convertido en un generador de optimismo social en los chubutenses, donde ha privilegiado la institucionalidad por encima de las confrontaciones y las mezquindades políticas.
Hoy es uno de los pocos funcionarios que teje con todos los sectores políticos y no tiene limitaciones para sentarse con cualquier jefe comunal.
El funcionario provincial ha sabido interpretar como pocos el libreto del gobernador Martin Buzzi, quien entiende que la excesiva concentración del poder en una persona, provoca la peligrosa sensación de vacío de poder debajo de su figura. De esta manera ambos dirigentes profundizan su estilo horizontal de conducción, donde la institucionalidad es lo que en definitiva consolida los liderazgos políticos.
El presidente del Instituto de Asistencia Social está demostrando tener plafón político, puesto que ha podido generar una red de contención en los jefes comunales de la cordillera.
Es decir, que el reconocimiento que se ha ganado el comodorense no sólo es en el sector de la acción social a través del juego, sino en el resto de la administración pública que lo coloca como uno de los pocos que aporta volumen de gestión al gobernador. “A Marcelo Diz lo quieren en todos lados porque no discrimina a nadie en el reparto de los recursos que genera el IAS”, dijo una alta fuente del gobierno.
De esta manera, desde el IAS se viene realizando un trabajo minucioso donde la horizontalización de las decisiones, ha permitido vasos comunicantes entre los intendentes y el gobierno provincial.