Según un informe de la Universidad de Nacional de Avellaneda (UNDAV), el costo de vida de los jubilados aumentó entre 60 y 70% en comparación con 2018. La canasta de consumo de marzo más básica supera los $8.900, apenas $1500 menos que la jubilación mínima ($10.400).
El costo de vida de los jubilados subió entre 60 y 70% en comparación con 2018, según indica un informe de la Universidad de Nacional de Avellaneda (UNDAV) en base a la la evolución de los precios relevados por el INdEC.
“El aumento en el último año no fue menor al 58,3%, para el caso de la canasta más onerosa”, detalla el estudio de la Undav, que alerta: “La variación trepa al orden del 61%, para el segmento medio, y casi a un 70% cuando se consideran los bienes y servicios más frugales a los fines de satisfacer los requerimientos de vida fundamentales”.
En base a estos datos, la canasta de consumo de marzo más básica supera los $8.900, cuando hace un año era de $5.250; la de costo medio excede los $11.753,6contra $7.300; y la más cara ronda $14 mil cuando en marzo de 2018 salía $8.830. A su vez, el incremento respecto a 2016 es de 180%.
Entre los principales aumentos figuran los alimentos y bebidas con 58,3%, medicamentos con 53,1%, y los servicios y gastos de vivienda con 52,4%.
Cabe destacar que la jubilación mínima se encuentra en $10.400, con lo cual supera apenas por $1500 a la canasta básica.
«La canasta de consumo de los adultos mayores aumentó más que la inflación, este sector social se ha visto notoriamente perjudicado. En ese sentido, se han registrado casos de personas que tienen que optar que medicamentos tomar, porque no pueden comprar todos lo que necesitan, lo que exhibe lo delicado de la situación”, advierte el informe.
Para realizar el relevamiento, UNDAV tomó los productos que componen la canasta de jubilados escogidos en función de su relevancia para representar los gastos de las personas de tercera edad. Es así que dicha canasta está compuesta por bienes de consumo típico de esta franja etaria y está construida en base a datos provenientes de fuentes oficiales, tanto como de relevamientos de información de mercado.
En principio, la canasta elaborada posee artículos para todos los rubros elementales de los gastos cotidianos de los adultos mayores (alimentos, bebidas, hogar e higiene, vivienda, vestimenta, recreación, atención médica y gastos relacionados con la salud, transporte público y otros servicios públicos). Y se incorporan otros artículos básicos e imprescindibles para los jubilados (medicamentos; frutas y verduras; alquileres; gastos en luz, agua y electricidad; entre tantos otros).