Al conjunto «Azzurro» le cuesta horrores conseguir marcar en la meta contraria, objetivo principal del balompié arcaico, pretérito, contemporáneo, moderno y posmoderno. Descríbalo como usted quiera. Sin dudas que con tan pocos tantos marcados jugando en casa, la campaña no puede ser brillante ni mucho menos.
Hoy empató frente a Juventud Unida Universitario de San Luis, cero a cero como no podía ser de otra manera. fue en un encuentro que amaneció como entretenido pero poco a poco fue perdiendo su interés. Las dos más claras las tuvo el esquelense Nicolás Bubas mientras que Diego Rubilar sigue ocn el arco cerrado desde que llegó a la institución.
El conjunto dirigido técnicamente por José Luis Roque Drago acumuló ya su sexto empate consecutivo y el estigma de no ganar en casa hace raquitica su cosecha de puntos a tal extremo que, si mañana gana su partido Unión de Mar Del Plata e3n Cipolletti, la Comisión de Actividades Infantiles quedará junto a los puntanos en la penúltima ubicación.
Con sólo dos de esos seis partidos que hubiera ganado, que bien pudo haberlo hecho y perdió puntos increíbles, el elenco comodorense estaría hablando de otra realidad, pero hoy la que le toca es esta y cuando se transita por los caminos de la tibieza, no hay mente fría ni corazón caliente que puedan templar la amargura de seguir dejando pasar oportunidades.
Comienzo demorado
Por falta de un médico, el árbitro del partido -Facundo Tello Figueroa, de Bahía Blanca- debió demorar en 42 minutos el inicio del encuentro en el Estadio Comodoro de Kilómetro 3. Un malentendido provocó la ausencia de un facultativo en el recinto deportivo de General Mosconi y se debió conseguir una solución alternativa.
El hecho es que en un torneo de AFA, este tipo de situaciones no se suele dar muy a menudo pero también es certero que sólo había un paramédico en la soleada y ventosa tarde comodorense y se necesitaba de la presencia de un facultativo para iniciar el match.
De apuro, los dirigentes de la CAI convencieron al ex traumatólogo de la institución, el Dr. Julián Petrolito para que se acercara a la cancha desde Rada Tilly, por lo que hubo que esperar el arribo del doctor en medicina para que se pudiera comenzar a jugar. Insólito.
Foto: Walter Calderón/CAIenlaBNacional