Además, la caída interanual en diciembre fue de 7% y según los datos del Indec, la actividad económica acumula así siete meses seguidos en retroceso.
La actividad económica cayó 2,6% en 2018 con respecto a 2017 y en el mes de diciembre la caída interanual fue del 7%, según registros del Indec. Esto se debe a las fuertes caídas del campo, la industria, la construcción, el transporte, energía y el comercio.
Según el estimador mensual de actividad económica que elabora el Instituto Nacional de Estadística y Censos, en relación al año 2015 la actividad se achicó poco más del 2%.
En el año 2016, la caída de la actividad cayó un 2,3%, mientras que en 2017 se recuperó 2,9% y en 2018 volvió a caer un 2,6%. Según las estimaciones, este 2019 podría caer 1,7% y terminaría en un retroceso total de casi el 4%.
En los últimos 36 meses, entre los años 2015 y 2018, fueron 19 los registros de números negativos en la medición interanual, mientras que en 18 meses con el indice desestacionalizado con relación al mes anterior.
El retroceso de la economía se inició en el mes de abril y se profundizó en junio, y retrocedió por la sequía, la disparada del dólar, de la inflación y el encarecimiento del crédito. Según cifras del Ministerio de Producción y Trabajo, esto afectó el empleo registrado y el poder de compra de los salarios. También retrocedieron tanto el consumo como la inversión, aunque desde septiembre dejó de caer el sector agrícola-ganadero.
Pese a la caída interanual y de la actividad económica, en diciembre hubo una mejora del 0,7& en relación al mes anterior. Según comentaron fuentes oficiales, “este dato preliminar indicaría que el piso de la recesión habría sido en noviembre y que a partir de diciembre la economía ya se encontraría en fase de recuperación”.
