En un juicio abreviado, aceptó su culpabilidad y lo condenaron a 13 años de prisión.
En un juicio abreviado, la Justicia de Mendoza condenó este martes a 13 años de prisión a un ingeniero civil y empresario reconocido de esa provincia que había sido denunciado por abusar sexualmente de sus tres sobrinas, cuando las hermanas tenían 8, 9 y 14 años, según informa TN.
La estrategia de Lucio Mario García, de 52 años, fue aceptar su responsabilidad y así evitar una condena todavía más dura. Sin embargo, más allá de las pruebas, el testimonio de las víctimas, fue una grabación con una confesión del imputado lo que causó más indignación y selló, quizás, su pena.
“No abusé flaco, abusar es una palabra muy grosera, no abusé, entre hombres te digo, le toqué… (se omite el resto de la frase para preservar a las víctimas)”. Este diálogo es el que mantuvo García con el padre de las nenas abusadas cuando este le fue a pedir explicaciones. Lo que ignoraba entonces el imputado, es que lo estaba grabando. “(…) Le toqué el cu… a una empleada también, que encima era espantosa, no es que yo sea un violador serial, un pedófilo ni nada (…) le puede pasar a cualquiera”, remató.
El capítulo que se cerró ayer se había iniciado en 2009, pero los abusos se extendieron durante tres años. Fue cuando corría ya el año 2012 que una de las víctimas se quebró y le reveló a sus padres lo que había sufrido.
Según publicó el portal MDZol, los abusos confirmados en total fueron seis, aunque las hermanas manifestaron que el ingeniero, cuñado de su mamá, las sometía cada vez que las dejaban a dormir en su casa aprovechándose de la confianza que le tenía su familia.
“Lo peor es que se hacía pasar por el tío piola, con el que uno se podía ir de vacaciones. De hecho, uno de los abusos se produjo durante un verano en Chile”, comentó al mismo medio una fuente cercana al expediente.
Finalmente, García fue detenido a mediados de 2019 cuando se presentó a votar en una escuela de Luján para unas elecciones y al presentar su documento descubrieron que tenía pedido de captura.
Tras conocer el fallo judicial, un familiar de las víctimas usó sus redes sociales para expresar su conformidad con la condena. “Somos una familia que confió en la Justicia. Que la luchó, que reunió pruebas durante años, que protegió y les creyó a sus hijas (…) La investigación de la fiscal logró probar todas y cada una de las pruebas y el implacable proceder del abogado querellante, lograron que triunfe la verdad. Esto es una puerta de esperanza para todas las niñas que han sido abusadas”, escribió.