Fue durante una conferencia en el G20 sobre energía, en la que además reclamó «una solución conjunta» para sostener las actividades productivas del país.
Matías Kulfas reconoció este viernes que la crisis del coronavirus provocará una caída del empleo y la producción sin precedentes y pidió «respuestas globales» durante una videoconferencia con los ministros de Energía de los países que integran el G-20, en la que se afrontó la crisis del coronavirus y de la OPEP, que define los precios del petréleo y llegó a pisos históricos antes del inicio de la pandemia.
«Necesitamos una solución conjunta basada en la solidaridad para evitar que la crisis destruya las capacidades productivas», señaló el ministro de Producción, que no quiso delegar la reunión virtual en el secretario de Energía, Sergio Lanziani.
«Estamos en un contexto extraordinario, en circunstancias a las que hemos tenido que adaptarnos, por una pandemia que está significando un enorme costo en vidas humanas. Las actividades económicas se han visto enormemente afectadas y somos conscientes de que el empleo y la producción, al igual que la salud, enfrentan un peligro inédito en décadas», reconoció Kulfas, minutos antes de conocerse en Argentina la extensión de la cuarentena.
Destacó que esta instancia de participación multilateral «es un ámbito privilegiado para generar soluciones», y pidió trabajar en conjunto para «preservar el capital organizacional de las empresas y evitar que esta crisis destruya nuestras capacidades productivas».
«El sector energético enfrenta los desafíos de una reducción temporal sin precedentes en la demanda mundial, que ha disparado una carrera descendente en los precios que pone en peligro bienes, inversiones y empleos», sostuvo y advirtió que esto «repercutirá en el mediano plazo en cada eslabón de las cadenas productivas, en la salud y en las condiciones de subsistencia», recupera La Política Online.
«El presidente Alberto Fernández impulsó en la reunión extraordinaria de líderes de este mismo foro la necesidad de establecer respuesta globales basadas en la solidaridad», recordó .
En ese sentido, el ministro destacó que «la Argentina reafirma su vocación por la elaboración de una respuesta de conjunto en el marco de las conversaciones multilaterales, respetando los principios de igualdad y soberanía, para garantizar la seguridad del suministro, devolver la estabilidad y previsibilidad indispensables al mercado energético y contribuir a preservar los empleos, la producción y el bienestar de nuestros ciudadanos».