Las autoridades del país lo admitieron tras dos días de negarlo. Trudeau y Trump ya habían deslizado esta hipótesis.
«Involuntariamente y por un error humano», fue la manera de la Guardia Revolucionaria de Irán de reconocer su responsabilidad en el derribo del avión ucraniano con 176 personas a bordo. El país llevaba dos días negando esta hipótesis, que habían planteado distintos países.
El comandante de la Fuerza Aeroespacial de este cuerpo militar de élite, Amir Alí Hayizadeh, dijo en una comparecencia televisada que el operador del sistema de defensa confundió el avión comercial con «un misil de crucero» y agregó que antes de disparar trató de contactar con sus mandos para obtener la aprobación pero el sistema de comunicación dio error y tomó una decisión «mala y apresurada».
«Todo el sistema defensivo estaba en el más alto nivel de alerta y se anunció mediante el sistema integrado que se habían lanzado unos misiles de crucero contra el país. En esos momentos, el sistema se enfrenta, a una distancia de 19 kilómetros, con un objetivo que se distingue como un misil de crucero», detalló.
El comandante explicó que que tras las amenazas del presidente Donald Trump de «tomar como objetivo una serie de lugares en el territorio de la República Islámica en caso de que haya una operación recíproca», las fuerzas iraníes estaban en el más alto nivel de alerta. Y destacó que el error estuvo motivado por «el aumento sin precedentes de los movimientos aéreos en la región, en especial vuelos de guerra de las fuerzas estadounidenses alrededor del país».
Hayizadeh también reconoció que hubo diez segundos para decidir y que no se informó a la Organización de la Aviación Civil de que cancelaran los vuelos comerciales en Teherán.
«El error fue nuestro, aceptamos todas las responsabilidades de este acto», reconoció Hayizadeh, quien exculpó a la Organización de la Aviación Civil y al Gobierno y justificó que estas instituciones negaran la hipótesis del derribo porque no contaban con la información.
El comandante aclaró que no querían ocultar el error pero que era necesario revisar lo ocurrido antes de dar una información oficial.
Las especulaciones sobre la posibilidad de un caso de derribo comenzaron el mismo día del siniestro y cobraron un tono oficial cuando el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, dijo el jueves que su Gobierno tenía información de que el Boeing 737 fue alcanzado por «un misil tierra-aire iraní».
Finalmente, a primera hora de hoy, las Fuerzas Armadas de Irán explicaron que el derribo fue involuntario y por «un error humano», debido a que el avión se situó cerca de un centro militar de los Guardianes de la Revolución con «una altura y una posición de vuelo de un objetivo enemigo».
Poco antes del derribo del avión ucraniano, Irán había efectuado un ataque con misiles contra una base aérea en Irak que alberga a tropas estadounidenses, en venganza por el asesinato días antes del general Qasem Soleimaní, por lo que esperaban una acción de represalia de EE.UU.
El aparato se estrelló al sur de Teherán poco después de despegar del aeropuerto internacional Imán Jomeiní con destino a Kiev con 167 pasajeros, entre ellos 82 iraníes y 63 canadienses, aunque estos últimos en su mayoría con doble nacionalidad, y nueve tripulantes ucranianos.
El aparato se estrelló al sur de Teherán el pasado miércoles poco después de despegar del aeropuerto internacional Imán Jomeiní con destino a Kiev, causando la muerte de sus 176 ocupantes.
Las críticas de Estados Unidos y Canadá
En Canadá y Estados Unidos no demoraron en llegar las críticas por haber postergado la verdad acerca de lo acontecido con el avión. Trudeau exigió que Irán se haga «plenamente responsable» de la muerta de los pasajeros, entre ellos 63 con pasaporte canadiense. Y el secretario de Estado de Donald Trump, Mike Pompeo apoyó las protestas en Teherán contra el régimen del supremo líder Khamenei y lo trató de mentiroso, corrupto e inepto y apuntó a la brutalidad del IRGC bajo la cleptocracia del líder. «Respaldamos al pueblo iraní que se merece un mejor futuro», señaló en su cuenta de twitter.
Fuente: La Política Online.