Se trata de la 103.7 que fue adquirida el año pasado por la Iglesia Universal del Reino de Dios, aunque la autorización del Enacom está pendiente. Su mención surgió de una investigación sobre lavado de dinero.
Desde sus comienzos como pastor en 1977 en un anfiteatro en la plaza Méier de Río de Janeiro, Edir Macedo supo que los medios de comunicación eran aliados clave para llegar con su prédica del evangelio, y sumar fieles y recursos. Así lo hizo en Brasil, donde el hoy magnate es dueño de Red Record, segunda en audiencia de ese país. Este canal produjo la telenovela “Jesús”, el éxito televisivo brasileño que se emite por Telefe y lidera el rating en la Argentina.
En Argentina, la FM 106.3 de Radio Buenos Aires fue rebautizada “Red Aleluya” cuenta con 25 repetidoras en todo el país, señala hoy el diario El Patagónico.
El año pasado, la Iglesia también compró la FM 103.7 de Comodoro Rivadavia, pero la adjudicación aún está en proceso de aprobación por parte del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), según confirmó este fin de semana una minuciosa investigación transfronteriza denominada “Paraísos de Dinero y Fe”, del Centro Latinoamericano de Investigación Periodística (CLIP), Columbia Journalism Investigations (CJI), OCCRP y nueve medios de comunicación de la región, entre ellos Infobae con sus periodistas Mariel Fitz Patrick y Sandra Crucianelli.
Allí se recuerda que desde hace casi dos décadas, pastores brasileños y argentinos se volvieron protagonistas de las madrugadas de América TV y Canal 9, en los que la IURD alquila espacios.
Su famoso programa “Pare de sufrir” se sigue emitiendo en estos dos canales, y “La Hora del milagro” lo hace por Telefe. El año pasado la Iglesia Universal también pagó por emisiones televisivas en las señales de cable Net TV y LN+.
Puntualmente, la Iglesia Universal del Reino de Dios en Argentina (IURD) está bajo sospechas de lavado de dinero, por lo que la AFIP investiga millonarias donaciones anónimas. La congregación está bajo la lupa judicial por “cuantiosos incrementos de depósitos de dinero en efectivo” registrados en sus cuentas entre 2010 y 2014. La entidad aduce que provienen del diezmo de sus fieles.
Fieles sin identificar
Fundada en Brasil por el líder evangélico y magnate de medios Edir Macedo, la filial argentina de esta Iglesia está bajo la lupa judicial por “cuantiosos incrementos de depósitos de dinero en efectivo” registrados en sus cuentas entre 2010 y 2014. Los movimientos fueron reportados como sospechosos de lavado de activos al no estar corroborado el origen lícito de los fondos, hasta donde pudo determinar la Justicia.
Ante las alertas bancarias, la Iglesia argumentó en ese momento que era dinero proveniente del diezmo de sus fieles y que no podía identificar a los donantes porque las contribuciones se hacían en su mayoría durante el acto litúrgico, en forma anónima. Los montos depositados generaron Reportes de Operaciones Sospechosas (ROS) de las entidades bancarias por encima de los 830 millones de pesos (casi 100 millones de dólares al cambio de ese momento). Fueron canalizadas luego en otras operaciones bancarias y plazos fijos, así como en la compra de inmuebles, autos y un avión.
La IURD abrió su primera sede en Argentina en 1990 en la calle Lavalle. Una década después, llegaba a los 80 templos, y hoy tiene 281 sedes en las principales ciudades de todas las provincias argentinas, según informa en su sitio web. La sede de Comodoro está ubicada en Rivadavia 951 y fue inaugurada en octubre de 2013.
Se desconoce su número exacto de fieles, aunque la doctora en Ciencias Sociales por la Universidad de Buenos Aires Mariela Mosqueira sostiene que “la IURD no tuvo éxito en su expansión en términos de feligresía” en Argentina. “Si bien se extendió territorialmente en todo el país, y en muchos barrios se ve un local de la Iglesia Universal, en general, suelen estar vacíos. El templo más importante y el más concurrido es de la Capital Federal, en el barrio de Almagro”, afirma esta especialista en sociología de la religión e investigadora del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), consultada por Infobae.
Mosqueira integró el equipo de este centro de investigación estatal que llevó adelante la Segunda encuesta nacional sobre creencias y actitudes religiosas en 2019. Según este estudio, el 15,3% de los argentinos se declaran evangélicos. Y de ese porcentaje, solo el 0,6% dijo pertenecer a la Iglesia Universal.
La entidad religiosa en Argentina ya había recibido a principios de 2019 una sanción administrativa y multa de la Unidad de Información Financiera (UIF) por no identificar a las personas que le donan dinero a través del diezmo, ni requerirles una declaración jurada sobre la licitud y origen de las donaciones por encima de determinado monto. La Iglesia Universal argumentó ante el organismo antilavado que le “resultaba imposible” identificarlas porque “las ofrendas” se hacían en forma anónima durante las reuniones religiosas y no les podían pedir esa información a los donantes para “no perturbar los actos litúrgicos”.