Dos individuos, aparentemente en estado de ebriedad, se encontraban cerca del sitio y afirmaron desconocer las causas del incendio. Ambos sujetos mencionaron que presumían que un amigo se encontraba dentro de la vivienda. Uno de ellos presentaba quemaduras visibles, por lo que se solicitó una ambulancia para su atención y posterior traslado al Hospital.
El equipo de Bomberos Voluntarios se hizo presente en el lugar con dos autobombas. Tras sofocar el incendio, encontraron el cuerpo sin vida de una persona en la cocina de la vivienda.
También acudieron al lugar el jefe de la Seccional Séptima de Policía, y personal de Defensa Civil. La fiscal de turno, Do Carmo, fue informada de la situación y ordenó el traslado del cuerpo a la morgue judicial para la autopsia correspondiente.
El personal de Criminalística trabajó en el lugar para recopilar pruebas y el área fue asegurada para realizar futuras diligencias con luz diurna, bajo la supervisión de un perito especializado en incendios.