El gobernador Martín Buzzi junto al presidente de la institución, Gustavo Córdoba dejó inauguradas obras en instalaciones del Club Huracán de nuestra ciudad. En la oportunidad, se dejaron inaugurados vestuarios de local, visitante y para árbitros, con duchas, enfermería con baño y dos baños más con duchas.
Otras de la obras que se realizaron en la cancha del barrio Industrial se concretaron en el buffet, en los cercos perimetrales y en la entrada a la cancha, con la colocación de molinetes. “Esto es un eslabón más en una larga cadena donde hubo mucha gente trabajando para hacer crecer el club”, destacó el gobernador Martín Buzzi, y subrayó el trabajo de la dirigencia. “Es muy fácil ayudar al que ya se ayuda, si uno pone el cemento y la Comisión Directiva trabaja, no se le puede decir que no”, señaló y remarcó que “este es un club que hace una importante tarea social, con un impacto significativo en muchos barrios de la ciudad”.
Por su parte, el presidente del Club Huracán, Gustavo Córdoba, agradeció los aportes y contribuciones tanto del gobierno provincial como del municipal y de privados, y consideró que “este es un campeonato con el que yo me voy que es la satisfacción más grande de pegar un ladrillo, de inaugurar una obra” y agradeció a los restantes miembros de la Comisión Directiva por su trabajo y compromiso.
Finalmente, el presidente de Chubut Deportes, Ricardo Fueyo, valoró la historia recorrida por el club desde sus inicios en el Barrio Pietrobelli y destacó que “en Huracán fluye el progreso y el sentimiento”. “La pasión de aquel Huracán en la cancha de Pietrobelli es la pasión que se repite un domingo con el Torneo del Interior, o un miércoles por el torneo local jugando en cualquier lugar. Y en el medio se paso de aquella cancha de tierra original a este complejo deportivo que además esta en una zona que hace años atrás era una zona abandonada y un basurero en la ciudad”.
“Hoy Comodoro tiene acá 10 hectáreas que se llenan de verde, que están llenas de vida y que están llenas de sentimiento”, enfatizó Fueyo. “Las cosas no caen en paracaídas, las cosas tienen razón de ser. Y cuando esas cosas tienen inteligencia, tienen dirigencia que se ocupa, continuidad en las etapas, y además siguen unidas en el sentimiento, la luz va a brillar siempre porque el sentimiento sigue vivo”, finalizó el funcionario.