Guillermo Nicolás, embajador argentino en el país árabe confirmó que la situación de Marcelo Martínez e Ivo Chiesa “es muy complicada”. La familia de uno de ellos envió un abogado desde Buenos Aires para destrabar el conflicto judicial.
Aquí en Doha es común escuchar a los hinchas argentinos hablar de sus compatriotas detenidos en Qatar desde el 12 de octubre, acusados de tres cargos muy duros para este país: estafa, lavado de dinero y asociación ilícita.
Marcelo Martínez e Ivo Chiesa permanecen incomunicados con el mundo exterior. Ambos pasan sus días a la espera de que la Justicia qatarí se expida sobre los hechos y resuelva si son condenados y, en el caso de que así suceda, qué pena van a recibir.
En las últimas horas, la familia de Martínez, que se presentaba en sus redes como el primer hincha argentino en arribar al país organizador del Mundial, publicó un comunicado mediante el cual solicitaron que se transmita “el tormento que están pasando” los argentinos.
“Fueron estafados por una Inmobiliaria en Qatar. Están privados de la libertad para ser investigados por la Justicia, que tiene que dictaminar si son víctimas o victimarios de dicha estafa”, expresaron.
El 16 de noviembre, la Justicia local decidió renovar por 30 días el plazo de detención de ambos. Es decir, estarán presos hasta el 16 de diciembre, fecha en la que faltarán 48 horas para la final del Mundial.
Guillermo Nicolás, embajador argentino en Qatar, confirmó los hechos y aconsejó a la familia de Martínez la rápida asignación de un abogado para resolver su situación judicial. “Tuvieron una audiencia virtual. El juez y el fiscal decidieron dejarlos detenidos hasta que termine la investigación”, indicó el funcionario.
“El juez puede prorrogar la detención por seis meses”, agregó Nicolás. Respecto a Martínez, el detenido que brindó una gran cantidad de entrevistas en los medios nacionales, aseguró que “le conviene ser deportado”.
“El otro chico es distinto porque acá tenía trabajo. No creo que el Estado les de una segunda oportunidad de permanecer aquí. Esto es lo que creo yo. Para Marcelo sería una solución, más allá de que no sé cómo terminará situación financiera”, manifestó.
“El cónsul los vio apenas lo detuvieron. La acusación para ambos es grave, con tres cargos importantes. Nosotros no tenemos acceso a la causa, no podemos ser parte tampoco. No porque no querramos”, sostuvo el embajador.
En las calles, la teoría de que ambos permanecen presos como “mensaje al resto de los hinchas del mundo” cobró fuerza en los últimos días. La misma no fue confirmada por el embajador, que sí manifestó que “tranquilamente podrían extenderle seis meses más la detención a ambos”.
Angie, la esposa de Martínez, explicó que en la audiencia virtual iban a presentarse todos los culpables ante la Corte y que ahí se decidiría el futuro de ellos. “Dijeron que querían la libertad y el juez decidió que necesitaba 30 días más para investigar”.
“Tenemos abogado acá (en Argentina) y un estudio en Qatar que nos va a asesorar. Estamos desesperados. Marcelo es turista y no hay excarcelación para los turistas”, continuó.
La acusación contra el “primer hincha argentino en Qatar”
“Lo llamaron a declarar por una banda que atraparon en Qatar, la cual se dedicaba al lavado de dinero, contrabando, robo, reducción de productos y estafas con departamentos. Marcelo fue estafado. Alquiló unos departamentos para unos amigos de Argentina que van al Mundial con él y lo estafaron”, contó Claudia Martínez, su hermana, a TN hace algunas semanas.
La familia de Martínez está convencida de que Marcelo es una víctima y que en realidad las sospechas sobre él recaen por la inmobiliaria que le daba estos alquileres.
Hace algunos días, Agustín, un hincha de la Selección Argentina que viajó junto a su familia a Doha, le contó a este medio fue una de las personas que le alquiló un departamento a Marcelo. “Muchos le habían reservado otras unidades”, indicó Agustín.
Allí detalló que Marcelo les pidió US$1300 por persona para reservar los departamentos y, tras su detención, el dinero está en el limbo. “Nosotros mandamos US$2600, mi mamá otros US$1300. Mi amigo y su mujer lo mismo. Para nosotros esa plata está perdida, ahora queremos disfrutar del Mundial y después veremos”, especificó.
“Están detenidos en la misma celda que los estafadores. Tememos por sus vidas. En unos días los abogados presentarán una apelación para que durante la investigación puedan ser excarcelados”, completó la familia de Marcelo.
“En Argentina, en dos o tres días estarían libres esperando la resolución judicial. Acá no es así”, remarcó el embajador Nicolás. Si bien la pena es incierta, de ser encontrados culpables podrían ser condenados y trasladados a otro penal, en donde pasarían de estar meses a años encerrados.