Apenas llegaron los primeros lotes de Rusia, la cartera sanitaria se reservó al menos 3000 vacunas que llegaron al país y que no fueron repartidas entre las provincias. Ginés y su sobrino se vacunaron con las primeras dosis que llegaron.
Según publica La Nación«Hablen con Ginés», era el secreto a voces que circulaba en la política para adelantarse en la fila de la vacunación. Entre quienes se vacunaron sin respetar el calendario de vacunación figura Lisandro Bonelli, sobrino de González García y su jefe de gabinete en la cartera sanitaria. Tiene 44 años y se inoculó con las dosis que llegaron a la Argentina en el primer vuelo de Moscú.
El último capítulo de esa trama tuvo que ver con la sala de vacunación que se montó esta semana en la propia cartera de Salud, con enfermeros del Hospital Posadas. Allí se vacunaron funcionarios, empleados públicos y choferes que estaban bajo el ala de González García y que no son personas de riesgo, ni deben vacunarse en esta etapa del operativo.
Invitado por un secretario de González García, en ese operativo «vip» se vacunó el periodista Horacio Verbitsky. Al parecer este jueves en el edificio de los murales de Evita se inocularon diez personas más que lograron acceder a la cúpula de la cartera sanitaria, sin turno.
En ese grupo, estuvieron el diputado Eduardo Valdés -amigo íntimo del Presidente- y el senador Jorge Taiana. Alberto Fernández les había pedido a ambos que se vacunaran y se hisoparan antes de viajar con él a México, este domingo. Finalmente fueron bajados de la comitiva.
También habrían sido vacunados Hugo Moyano, su esposa, Liliana Zulet, y su hijo Jerónimo, que tiene 20 años. Hay quienes sugirieron desde el círculo íntimo del jefe camionero que fue Zulet, con su larga trayectoria como empresaria de servicios médicos, la que gestionó las inoculaciones, aunque es un secreto a voces que la única manera de conseguir las vacunas es a través del Estado, «con ayuda política».