El diputado radical Miguel Bazze aseguró que la fuerza que lidera Mauricio Macri «sigue siendo un límite porque mantiene una visión liberal del Estado». «No es la respuesta del radicalismo sino de una dirigencia anacrónica que llevó al partido casi a la extinción», respondieron desde el macrismo.
Mientras que algunos sectores de uno y otro lado trabajan para preparar el terreno para un futuro acuerdo, ayer desde el radicalismo bonaerense le pusieron freno a esa posibilidad, marcando una profunda diferencia ideológica.
«Tenemos una visión distinta con el PRO sobre el Estado, la economía y la sociedad. Ellos son liberales, tienen un andamiaje basado en la reducción del Estado, lo cual no tiene nada que ver con lo que pensamos los radicales que es un Estado con mucha presencia en la distribución de la riqueza», aseguró Bazze.
El titular del comité bonaerense de la UCR sostuvo que «el PRO es un límite para los acuerdos políticos, pero si abandonan su visión liberal podemos llegar a ponernos de acuerdo para impulsar políticas consensuadas en el Congreso».
Finalmente, Bazze sostuvo que «es natural que el PRO quiera constituirse en partido nacional, pero ir a buscar gente de otros partidos no es lo más conveniente».
La respuesta desde el macrismo no se hizo esperar. «Hay partidos que se dedican a diferenciarse de otros», disparó el también diputado Federico Pinedo.
Pero el más duro fue el legislador porteño, Cristian Ritondo. «No es la respuesta del radicalismo sino de una dirigencia anacrónica que llevó al partido casi a la extinción», aseguró.
Después de las elecciones de octubre, el PRO inició un proceso para atraer dirigentes de otras fuerzas, fundamentalmente del radicalismo, ante la fuerte división que surgió en el tradicional partido tras el fracaso en los comicios. De hecho, Mauricio Macri mantuvo en las últimas semanas encuentros con distintos intendentes radicales, lo que despertó el rechazo de un sector del radicalismo que responde al ex candidato presidencial Ricardo Alfonsín.
Fuente y foto: Infobae.com
