El ex presidente y actual senador de Chile, Eduardo Frei, expuso en Comodoro y ante la prensa local sobre “La integración como camino para el crecimiento” y también defendió la construcción de represas en la Patagonia argentino-chilena, las cuales son resistidas por los grupos ambientalistas.
Tras indicar que Chile debe avanzar junto a Argentina en una integración energética, Frei -que fuera presidente de su país entre 1993 y 1997 y que actualmente es senador-, indicó que en el marco de la crisis internacional los países latinoamericanos deben “afrontar los temas globales unidos”.
Atribuyó estos problemas de integración a cuestiones políticas, culturales y a “la poca capacidad de entendimiento entre los países”. Para ejemplificar la relación que Argentina tiene con Chile actualmente indicó que en 1994 los socios comerciales eran en primer término Estados Unidos, luego Japón y Argentina. Actualmente el primer socio comercial de Chile es China, el segundo Japón, luego Estados Unidos y Argentina ocupa el puesto 9.
Frei firmó junto a Carlos Menem en 1997 el “Tratado binacional minero” que permite la explotación transfronteriza de yacimientos minerales y cubre un área de más de 200.000 kilómetros cuadrados. Este tratado permite el uso irrestricto del agua esté del lado que esté. Así fue como se dio lugar a la explotación minera en lugares como San Juan.
El tratado minero cubre más del 95% de la frontera entre Chile y Argentina. Catorce años después de su firma, Frei consideró que el tratado se puede mejorar. “Hoy en día se ha avanzado mucho todo el tema medioambiental y protección del ambiente pero esa es otra parte del tema de la integración. Si hay que hacer una modificación, no hay ningún problema”, sostuvo.
Afirmó que cualquier proyecto debe pasar varias instancias, como consultas públicas y evaluaciones regionales y nacionales. Sin embargo, el Tratado Minero admite que desde el momento en que las empresas acceden a los permisos de exploración, se encuentran protegidas por los acuerdos de libre comercio o de protección a las inversiones.
Si a las represas
Desde ese lugar también justificó la construcción de represas en la Patagonia, más allá de que los proyectos cosechan resistencia de un lado y del otro de la cordillera.
“Aquellos que dicen que no podemos hacer represas para evitar arrojar el agua al mar creen que nos están condenando en el futuro en un mundo en el que no vamos a tener agua”, dijo Frei.
Indicó al respecto que “lo que más me molesta de estas campañas es que algunos americanos piden acá lo que en su país no hacen”. Luego afirmó que en este tema “estamos ante la eterna discusión: ¿Hacemos o no el desarrollo energético? ¿Qué vamos a hacer? ¿Vamos a ir por la energía solar, por los aerogeneradores? ¿Pero cuánto cuesta producir energía alternativa? ¿Estamos dispuestos a pagar esto?”.
