En el marco de una guerra de mercados, el anuncio de medidas que flexibilizan la compra de dólares repercutió en un nuevo descenso de la cotización del mercado ilegal. En la plaza formal, se mantuvo la cotización del jueves, de 4,49 pesos por dólar.
La cotización oficial del dólar se mantuvo ayer en 4,49 pesos, mientras que en el paralelo perdió cinco centavos, a 5,85 pesos. El retroceso del blue coincide con la publicación de dos resoluciones -una sobre la compra de divisas con fines turísticos y otra referida a los plazos de liquidación de exportación- para flexibilizar la operatoria.
La demanda de divisas continúa siendo marginal en este segmento, casi sin variaciones, y en el formal se redujo a partir de los mayores controles a la compraventa de moneda extranjera. Según un relevamiento del Banco Central, el año pasado 3,4 millones de personas, 12 por ciento de la población mayor a 18 años, realizaron alguna operación con moneda extranjera. En lo que va del año esa participación se ubica por debajo del 10 por ciento (unos tres millones). Las reservas permanecieron en 47.161 millones de dólares.
“Sólo una baja proporción de la población argentina impulsa la formación de activos externos”, señala el informe del Central. Según el texto, en 2011, considerando aquellas personas físicas o jurídicas (con edad mayor o igual a 18 años) que compraron hasta una sola vez moneda extranjera e incluso por pequeños montos, la participación alcanza, a diciembre último, a ese 12 por ciento. “Se registra hasta el que compró un dólar en el mercado único y libre de cambios”, explicó un colaborador de la titular del Central, Mercedes Marcó del Pont. De ese guarismo, la mayoría responde a “grandes o medianos ahorristas”.
Según el documento del Central, el 41 por ciento de los 3,4 millones de habitantes que adquirieron moneda extranjera el año pasado lo hizo por montos de entre 1.000 y 20.000 dólares, el 37 por ciento compró más de 100.000 en el año y el 5 por ciento menos de mil. En el medio se encuentran los segmentos de compras por entre 20.000 y 50.000 dólares, que representaron el 10 por ciento de los ahorristas dolarizados, y con el 7 por ciento se ubicaron las operaciones entre 50.000 y 100.000 dólares. La participación no parece demasiado baja, teniendo en cuenta que la operatoria la podrían estar haciendo jefes o jefas de hogar.
Los guarismos tampoco toman en cuenta las operaciones que se tramitan en el segmento informal ni su comparación, por ejemplo, con el bajo nivel de bancarización de la economía. Desde el Central explicaron a este diario que con la aplicación de controles a la compra de moneda extranjera la participación se redujo a menos del 10 por ciento, pero esas medidas también estimularon el mercado paralelo. De todos modos, las operaciones en el mercado informal equivalen a entre 15 y 20 millones de dólares diarios.
Ayer la operatoria en el segmento formal no deparó cambios, en una rueda con escaso negocios, debido al feriado en Estados Unidos. En la plaza se operaron apenas unos 159,4 millones de dólares y el Central no intervino en la plaza cambiaria. A pesar de la ausencia oficial, el billete verde en el mayorista cedió algunas posiciones. En el informal, las operaciones convalidaron un dólar blue más bajo, a 5,85 pesos, lejos de los 6,15 pesos a que llegó a pagarse la semana pasada.
Las reservas no sufrieron cambios respecto del cierre del jueves. En los últimos días el stock de reservas no viene reflejando el volumen adquirido por el Central en la plaza cambiaria. En lo que va del año lleva acumulados 6200 millones de dólares de compras, pero las reservas sólo aumentaron en 1200 millones. La diferencia se explica por la deuda con el Banco Internacional de Pagos (BIS, por sus siglas en inglés) de Basilea y otros bancos centrales europeos que le prestaron al Central en el segundo semestre del año pasado para amortiguar la caída de reservas producto de la corrida cambiaria de fin de año.
Los pagos realizados en lo que va del año ascienden a 2.000 millones de dólares sobre una deuda aún pendiente de 3.500 millones. También impacta negativamente el pago de obligaciones de deuda pública, a través del Fondo de Desendeudamiento. Estos pagos se intensificarán durante el segundo semestre, momento en que se vencen unos 4.500 millones de dólares, en partes iguales, de capital e intereses del Boden 2012 y del premio anual del cupón de PIB.
Fuente: Página/12