Una revista publicó un estudio que afirma que el coronavirus terminará transformándose en un simple resfrío, que solo causaría síntomas leves en niños.
Un estudio de la revista Science del mes de febrero sostiene que el coronavirus irá bajando su letalidad con el correr de los años. De hecho, cuando la mayoría de la publicación esté vacunada, el coronavirus terminará convirtiéndose en poco más que un leve resfrío.
Científicos, infectólogos y expertos, en su gran mayoría, creen que el Sars-Cov-2 nunca va a desaparecer. No obstante, sí que existe la posibilidad de que, a medida que la población se vaya vacunando, el patógeno comience a aflojar su letalidad.
De hecho, el estudio afirma que cuando se llegue a ese punto donde la mayoría esté vacunado, el virus se irá transformando en un simple resfrío. Asimismo, sería asintomático para los adultos y un leve catarro en los niños.
“Nuestro modelo sugiere que esta transformación tardará entre uno y 10 años”, explicó Jennie Lavine, investigadora de la Universidad Emory (Estados Unidos) a El País. Dentro de los factores que toma en cuenta este estudio, está la velocidad de las vacunaciones. Además, también se toma en cuenta el tiempo de inmunidad de una persona, una vez vacunada.
“Lo ideal es que la capacidad de bloquear la enfermedad sea duradera, pero que la capacidad de transmisión sea más corta”, detalló Lavine. Los expertos sostienen que la composición del SARS-CoV-2 es parecida a los virus del resfrío. Si esto es así, cuando la mayoría de la población esté vacunada, el virus no podría tener la misma letalidad, porque las vacunas lo impiden.
Mientras más mutaciones… ¿mejor?
La investigadora se refirió también a la cantidad de mutaciones que están apareciendo, como la del Reino Unido. Lavine y su equipo afirman que una variante que se extienda más rápido pero no sea más letal bajará la mortalidad. Además reforzaría la inmunidad de la gente, porque un infección asintomática mejoraría las defensas.
“Los virus o se adaptan y se hacen leves o desaparecen porque se quedan sin huéspedes”, explicó Cristina Calvo, jefa de pediatría del Hospital La Paz, de la ciudad de Madrid. “Lo lógico es que vaya perdiendo patogenicidad y letalidad”, agregó Calvo.