Eva tiene 20 años y gracias al apoyo de su familia y sus ganas, está haciendo historia.
Cuando completó el formulario de inscripción para ingresar a la Universidad Nacional de Salta, aclaró que iba a necesitar una acompañante pedagógica, y adaptaciones en las formas de enseñanza y evaluación.
En una primera instancia, desde el ámbito académico se resistieron pero sus padres, conocedores de las leyes que existen en la materia, exigieron su cumplimiento y que se respeten los derechos de su hija.
Eva ahora es alumna de la carrera de Ingeniería en Recursos Naturales y Medioambiente