“En el fútbol está todo inventado”, se escucha cada tanto en alguna mesa o en la tribuna. Sin embargo, las reglas cambian con los años y tal vez el mejor ejemplo es la implementación del VAR. Ahora, una nueva tarjeta llamó la atención.
La amarilla es amonestación, la roja significa expulsión. ¿Y la blanca? Es el reconocimiento al juego limpio, más conocido como “Fair Play”. Se trata de una tarjeta “positiva”. Ante cada innovación, aparecen los detractores y también quienes se entusiasman con la idea naciente.
Esta novedad fue estrenada en un partido de fútbol femenino, precisamente en el duelo entre Benfica y Sporting de Lisboa por la Copa Portuguesa. Minutos antes de que terminara el primer tiempo, la jueza Catarina Branca detuvo el juego.
Sacó de su bolsillo la tarjeta blanca y se dirigió hacia los médicos de ambos equipos, que debieron atender de urgencia a un hincha que se había desmayado. Acto seguido, los aplausos de las 15 mil personas presentes resonaron en el estadio.
Cuál es el objetivo de mostrar la tarjeta blanca en el fútbol
Esta implementación busca reconocer las conductas éticas de cualquier persona que esté en el estadio y queda a consideración del árbitro. Sería una suerte de “premio Fair Play” durante un partido.
Vale aclarar que esta tarjeta no tiene el reconocimiento de la FIFA, por lo cual no hay posibilidades que en el corto tiempo llegue a las ligas más importantes del mundo.
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El fútbol, ante otra revolución reglamentaria: evalúan detener el reloj en ciertos momentos de los partidos
El fútbol atraviesa una época de cambios en los últimos años: el desembarco del VAR, la implementación de los cinco cambios por partidos y el nuevo reglamento para las manos durante los partidos. Pero como si no fuera poco, podrían llegar nuevas medidas durante las próximas temporadas.
La International Football Association Board (IFAB), la cual está compuesta por las cuatro asociaciones británicas junto a la FIFA,aborda distintos temas y uno de ellos es la posibilidad de introducir nuevos cambios en el reglamento que permitan, a su juicio, mejorar el transcurso de los partidos.
La idea nació para controlar el problema generado por la pérdida de tiempo neto de juego. En la junta se buscará la aprobación para sustituir el actual “reloj corrido” por el “reloj parado”.
