En un contexto donde el abandono de animales es un problema creciente, Mabel Rodríguez tomo acción en la defensa de los derechos de los animales callejeros. Fundadora del grupo «Yo ayudo a un Callejero», dedicó casi una década a rescatar y cuidar a perros y gatos que viven en las calles. En diálogo con El Comodorense, compartió su experiencia y los desafíos que enfrenta en su trabajo.
Mabel Rodríguez es de Bahía Blanca, Provincia de Buenos Aires. “Desde hace alrededor de 10 años me dedico a ayudar a los animalitos, y hace casi 9 años formé el grupo ‘Yo ayudo a un Callejero'».
Su llegada a Comodoro la sorprendió por la cantidad de animales abandonados: «En Bahía no se ve así. Aquí, si pones una cucha, te la roban; si le pones un collar al perro, también te lo roban (…) vi que acá había mucho abandono, empecé de a poco, hasta que creé el grupo”.
“hay muchos perros en la calle y lamentablemente las personas que nos dedicamos a esto somos pocas y no damos abasto. Yo ahora actualmente tengo 25 perritos en la calle que alimento, y lo puedo hacer gracias a la colaboración de la gente”. Los 25 animales están en adopción.
Alimentación y Castración
Mabel se dedica a alimentar perros callejeros, organizar jornadas de adopción y llevar a castrar a los animales que viven en la calle. Su trabajo incluye la recolección de remeras para proteger a los perros tras las intervenciones quirúrgicas.
“Casi no tengo remeras viejas; necesito remeras porque las perritas que castramos les ponemos una remera para que no se saquen los puntos” comentó Mabel.
Jornadas de adopción
La motivación de Mabel también radica en la necesidad de concientizar sobre el abandono. “A mí me motiva el tema del abandono; la gente no es consciente de ir a castrar su perrito o su gato. Si saben que tú ayudas a los animales, te llaman para que se los lleves”, explicó.
“Sabía que acá no había grupos haciendo jornadas; había uno o dos grupos pero no hacían constante. Nosotros desde hace unos días tratamos de hacer todos los sábados jornadas. El sábado pasado nos arruinó estaba feo el clima pero ya hemos logrado hacer tres jornadas o cuatro” explicó.
“Este sábado si está lindo si no llueve ni hay viento hacemos jornada y esta jornada hace visible lo que nosotros hacemos. Yo tengo un montón de animalitos pero no me los puedo llevar todos porque no tengo cómo llevarlos a la jornada entonces muestro mi foto de mis animalitos les explico dónde están les explico qué les pasó les muestro qué están castrados y cuando piden animalitos los muestro de esa forma”.
La importancia de los voluntarios
La participación de voluntarios es fundamental para el éxito de las jornadas. “A veces hay más voluntarios y otras veces menos; estamos constantemente pidiendo ayuda porque a veces no tenemos animales para llevar”, comentó Mabel. “Nuestra jornada no se basa siempre en llevar animales porque muchas veces no conseguimos transporte”.
Mabel también destacó que “la gente dona alimentos o nos avisa si tiene una cuchita”.
Desafíos
“Lo vamos haciendo a medida que se puede; yo siempre lo digo: con los recursos y el tiempo que tenemos porque yo trabajo. Soy una persona normal como cualquier otra; la única diferencia es que ayudo a los animales”, explicó Mabel.
”La gente no entiende que si yo presto mi cuenta veterinaria para toda la gente que a mí me llama por día después cómo lo pago; eso hay que pagarlo” explicó.
Su compromiso va más allá del bienestar animal; ella también colabora en comedores cuando puede: “mío del voluntariado siempre fue desde muy chica; no solo el tema, lo mío es visible el tema de los animales, pero yo ayudo de otras formas; en el comedor, si necesitan gente para cocinar, yo soy cocinera; voy y colaboro cocinando (…) yo siempre que puedo dar una mano en lo que sea colaborar me gusta” concluyó.
Si deseas realizar una donación (remeras, mantitas, alimentos y frazadas) o comunicarte para participar en las jornadas de adopción, puedes contactarte al siguiente número: 297 540-4881.