La Cámara de Empresas Regionales de Servicios Petroleros de la Cuenca del Golfo San Jorge, Enrique Casares, salió al cruce de las declaraciones del vicepresidente de Asuntos Públicos de Pan American Energy (PAE), Mario Calafell Loza, quien indicó que la baja del servicio de limpieza de tanques por parte de Vientos del Sur tuvo lugar “de común acuerdo”.
Casares determinó que “la situación -de las PyMEs- es bastante apremiante. Estamos con los números en rojo y que una empresa decida dejar de prestar un servicio porque lo hace en condiciones desfavorables no quiere decir que sea de común acuerdo” con la operadora.
En declaraciones a Radio Del Mar, reiteró que tienen mucho para mejorar y que pueden ser más eficientes, pero en un contexto de acompañamiento, donde no haya que vender una camioneta para pagarle a un proveedor, ejemplificó.
“Acá la situación parte del estado en el que se encuentran las PyMEs locales”, determinó. “Si esto ocurriera en un contexto en el que la rentabilidad de las empresas fuera satisfactoria, sería un comentario nomás”, resaltó.
Determinó que “la situación es bastante apremiante. Estamos con los números en rojo y que una PyME decida dejar de prestar un servicio porque lo hace en condiciones desfavorables no quiere decir que sea de común acuerdo” con la operadora, en alusión a lo manifestado por el vicepresidente de Asuntos Públicos de Pan American Energy (PAE), Mario Calafell Loza.
Casares aseguró que “no conozco el caso puntual de Vientos del Sur pero sí de las empresas de la Cámara. Hay varios socios que están pensando en tirar la toalla”, confesó. Y dijo que “algunos para seguir trabajando deben seguir poniendo plata del bolsillo” y que esto “va más allá del orgullo por seguir adelante”.
En ese marco, tras ironizar que “los bancos están chochos con nosotros” –por la necesidad de pedir créditos por parte de las PyMEs, advirtió que hay “un porcentaje alarmante de socios que se acercan a comentar su situación” a la Cámara.
“No sería de extrañar que se decida dejar de prestar un servicio para que lo tome otra empresa”, manifestó, y reiteró que las empresas “tenemos mucho para mejorar” y que “podemos ser más eficientes pero en un contexto de acompañamiento donde la situación no sea tan apremiante y que haya que vender una camioneta para pagarle a un proveedor”, subrayó.
“Habría mucho para trabajar si la situación fuera diferente”, comparó. Como urgente, “necesitamos una rentabilidad acorde a la cadena de valor de la actividad petrolera donde ganemos todos, una renta más equitativa”, concluyó.