Mejor darse cuenta tarde que nunca, pensó. Decidió tomarselo con gracia y empezar a mandar su verdadero curriculum vitae.
El insólito caso tuvo lugar en Paraguay, donde un joven pasó un año entero enviando una lista de compras pensando que era su CV a diferentes empresas que, obviamente, no lo tuvieron en cuenta.
“Resulta que hace un año siempre estoy enviando mi CV para algún laburo por ahí y nunca me llamaron ni respondieron nada”, comenzó contando Arnul en sus redes.
Recién en estos días se dio cuenta la razón de que no lo hayan contratado aún: “Hoy –por el lunes- me doy cuenta de que el archivo de Word que estuve enviado por UN AÑO es una lista de súper”, dijo, acompañando la publicación de la captura de un email enviado a una empresa, con el archivo de Word que en realidad era una lista de compras algo variada.