Si bien aseguró que en las próximas horas le realizarán la resonancia en su rodilla, el defensor se mostró preocupado por su lesión.
La victoria de Boca que lo encamina hacia el título le dejó un sabor agridulce a los hinchas y futbolistas por la lesión de Marcos Rojo, que encendió las alarmas y de la que hasta él mismo se mostró preocupado.
Luego del encuentro, el aguerrido defensor de mostró emocionado hasta las lágrimas por los gestos de sus compañeros, quienes parecieron dedicarle la victoria.
«Desde que me caí en la cancha, me dijeron que lo iban a ganar por mí. Es lindo ver este gesto de tus compañeros», expresó Rojo, y entre lágrimas, agregó: «Me pongo muy contento por el triunfo y por los chicos».
Respecto a la molestia, y si bien en las próximas horas le realizarán una resonancia para confirmar el grado, el central, admitió. «Ya sufrí esta lesión. Todo indicaría que es el ligamento».
Luego del partido y de las declaraciones, Marcos Rojo dejó el estadio Eva Perón de Junín rengueando y evidenciando el gran dolor que sufre por la lesión en su rodilla.